Una aventura muy humana a pesar de estar protagonizada por una elfa inmortal.

Frieren explora temas hasta ahora inéditos en la fantasía medieval y vemos el mundo desde el prisma de un ser que ha vivido milenios y otros tantos que le quedan por vivir. Frieren no experimenta el tiempo de la misma manera que sus seres queridos, y lo que para ellos es toda una vida para ella no es más que un parpadeo en el tiempo.

Una animación excelente, un diseño artístico precioso, una BSO impresionante, y un ritmo propio sin ningún miedo a tomarse su tiempo para preparar las situaciones y construir los momentos cómo estos se merecen.
Frieren te reconforta el corazón cuando quiere ser tierno, te levanta de la silla cuando es épico y te desgarra el alma cuando es trágico.
Todo protagonizado por unos personajes muy bien construidos con los que es muy fácil encariñarte con ellos.

Un viaje que no dejará a nadie indiferente, y puede que te aporte un punto de vista diferente sobre cómo cuidar más tus relaciones personales y no dar nunca nada por sentado.