Sopa de Ganso es una de esas películas, que, como amante de las buena comedias que soy, nunca me harto de revisitar.

El humor inteligente y surrealista de los hermanos Marx destaca ante la actitud del resto de personajes, que parecen ser más tontos que los propios protagonistas.
Yo no sé si, al final, los gansos son los políticos de Libertonia y Sylvania, ya que llegan a hacer locuras más salidas de olla que de los propios hermanos.
Como crítica al contexto mundial del momento, la película arrasa.

El único pero que le pongo es que apenas sale la sopa de ganso, solo en los títulos de crédito. Me parece que no había tanto caldero para tanto ganso.