Matthew Vaughn director que sorprendió a todo el mundo con Kick ass" y filmó la mejor película de la saga de los X-men (X-men primera generación) se adentra con "Kingsman" en parodiar al cine de espías, sin llegar al ridículo de Austin Powers por ejemplo el gran problema de esta película es que es demasiado superficial y surrealista, con una violencia exagerada y a ratos incluso sádica, rompe con todos los estereotipos del género y añade además un humor negro no apto para todo el mundo. Colin Firth es el protagonista con un papel muy diferente al que nos tiene acostumbrados, Samuel L.Jackson es un mas que decente villano y se agradecen las breves apariciones de actores ilustres como Michael Caine o Mark Hamill, pero a pesar de esto la película no cumple las expectativas, el cine de espias no merece semejante parodia, nos basta y nos sobra con el James Bond interpretado por Roger Moore.
En resumen, cine para adolescentes sin pretensiones.