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seagal4ever rating:
10
3.3
784
Sci-Fi. Adventure
From the middle of the 60’s to the end of the 70’s, Turkey knew a flood of films inspired by heroes of foreign comics. During this era known as "the golden age of Turkish fantastic cinema", the local industry produced films which rival in daring and cleverness with minimal budgets. "The Turkish school" signals itself by an explosive blend of western and oriental cinema cultures. The film presented during the Festival, THE MAN WHO SAVED ... [+]
Language of the review:
- es
June 11, 2010
11 of 11 users found this review helpful
Fascinante filme de corte épico el que el cineasta Çetin Inanç decidió regalar a la humanidad allá por el año 1982. En plena crisis de la cinematografía, en las lejanas tierras de Turquía iba a surgir la que para muchos supone la obra maestra por antonomasia del cine moderno, un filme capital que supuso la culminación de un periodo y el inicio de una nueva era.
Pero como toda gran producción que sea digna merecedora de tal nombre, "Dünyayi kurtaran adam" cuenta con un guión de auténtica clase escrito por las maestras manos del nunca suficientemente valorado Cüneyt Arkin. Mezclando a partes iguales acción, filosofía, épica, suspense y pequeños toques de humor, Arkin fue capaz de articular una obra de carácter netamente universal y de un alcance que aún hoy en día sigue fascinando. Los eternos conflictos como la muerte, las luchas raciales y de clases o el amor son tratados con un absoluto respeto, además de con una profundidad pocas veces vista, iniciando el camino de lo que la postmodernidad iba a significar a partir de entonces.
El carácter simbólico que impregna cada uno de los fotogramas del filme no es óbice sin embargo para mostrar sin paliativos el carácter más oscuro de la sociedad contemporánea y desarrollar así una constructiva crítica a la amoralidad que caracteriza el mundo de nuestros tiempos. Esta gran metáfora plagada de violencia y estilismo rebosa verdad por los cuatro costados...
Pero como toda gran producción que sea digna merecedora de tal nombre, "Dünyayi kurtaran adam" cuenta con un guión de auténtica clase escrito por las maestras manos del nunca suficientemente valorado Cüneyt Arkin. Mezclando a partes iguales acción, filosofía, épica, suspense y pequeños toques de humor, Arkin fue capaz de articular una obra de carácter netamente universal y de un alcance que aún hoy en día sigue fascinando. Los eternos conflictos como la muerte, las luchas raciales y de clases o el amor son tratados con un absoluto respeto, además de con una profundidad pocas veces vista, iniciando el camino de lo que la postmodernidad iba a significar a partir de entonces.
El carácter simbólico que impregna cada uno de los fotogramas del filme no es óbice sin embargo para mostrar sin paliativos el carácter más oscuro de la sociedad contemporánea y desarrollar así una constructiva crítica a la amoralidad que caracteriza el mundo de nuestros tiempos. Esta gran metáfora plagada de violencia y estilismo rebosa verdad por los cuatro costados...
SPOILER ALERT: The rest of this review may contain important storyline details.
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Spoiler:
No, en serio, está película es una basura. Pero de las gordas. Probablemente la más gorda. Sin embargo, hay algo que no puedo negar: en mi vida me he reído tanto como lo he hecho viendo esta "película" (llamar a esto película es quizás decir demasiado). Estamos ante la caspa más rancia que jamás se haya visto, ante un robo sistemático de planos de "Star Wars" y de la música del célebre John Williams, ante un atropello de las normas más elementales de montaje, narración y de dirección.
Es un sin sentido tan sumamente carente de lógica que, precisamente por ello, se manifiesta como una obra inmortal e imperecedera. Puede parecer contradictorio, y probablemente lo sea, pero "Dünyayi kurtaran adam" juega en otra categoría distinta al del resto de filmes. Estamos ante una rareza, y como tal merece ser tratada esta película. He visto otras "revisiones" turcas de clásicos americanos como la de "Star Trek" o "Superman", y tengo que decir que aunque también tiene su magia, no logran acercarse al carácter mítico que desprende esta obra.
"Dünyayi kurtaran adam" está por encima del bien y del mal. Está más allá del cine. Pero las risas que te echas no tienen nombre. Sólo de imaginar el cachondeo que debió reinar durante el rodaje del filme ya le entra a uno la risa tonta. Imaginarme al director "dirigiendo" a los actores, o al protagonista saltando insistentemente de una cama elástica a otra para lograr esos planos contrapicados que deben suponer más o menos el 20% del metraje, o las peleas contra los hombres disfrazados de rosa... Quién pudiera trabajar haciendo estas películas.
Qué más añadir. Esta película solamente debería permitir dos votaciones: o un 1 o un 10. No se merece nada distinto. De hecho yo mismo le tenía clavado hasta hace poco un 1, pero el hecho de haberla revisionado recientemente me ha hecho cambiar de idea. Esta película se merece un 10. De verdad, después de estar 90 minutos viendo esto, uno termina con el cuerpo totalmente dolorido de reírse tanto, de hecho la última media hora es especialmente dura porque ya te duelen hasta músculos que desconocías que existieran, y sin embargo sigues riéndote a carcajada limpia.
No hay ninguna terapia mejor que esta película para desconectar un poco del mundo real y entrar en el absorbente y delirante microcosmos que Inanç y Arkin nos regalan. Porque eso es lo que esta película es: un regalo para ver la vida con más optimismo que nunca, una experiencia casi religiosa. Una renovación completa, pues a la media hora de metraje es posible que ya no te queden más lágrimas que soltar de la risa. El cuerpo humano tiene un límite a la hora de reír, y esta obra lo pone a prueba. Mis más sinceros respetos para todas las personas implicadas en la elaboración de esta película. Sois mis ídolos, de verdad.
Es un sin sentido tan sumamente carente de lógica que, precisamente por ello, se manifiesta como una obra inmortal e imperecedera. Puede parecer contradictorio, y probablemente lo sea, pero "Dünyayi kurtaran adam" juega en otra categoría distinta al del resto de filmes. Estamos ante una rareza, y como tal merece ser tratada esta película. He visto otras "revisiones" turcas de clásicos americanos como la de "Star Trek" o "Superman", y tengo que decir que aunque también tiene su magia, no logran acercarse al carácter mítico que desprende esta obra.
"Dünyayi kurtaran adam" está por encima del bien y del mal. Está más allá del cine. Pero las risas que te echas no tienen nombre. Sólo de imaginar el cachondeo que debió reinar durante el rodaje del filme ya le entra a uno la risa tonta. Imaginarme al director "dirigiendo" a los actores, o al protagonista saltando insistentemente de una cama elástica a otra para lograr esos planos contrapicados que deben suponer más o menos el 20% del metraje, o las peleas contra los hombres disfrazados de rosa... Quién pudiera trabajar haciendo estas películas.
Qué más añadir. Esta película solamente debería permitir dos votaciones: o un 1 o un 10. No se merece nada distinto. De hecho yo mismo le tenía clavado hasta hace poco un 1, pero el hecho de haberla revisionado recientemente me ha hecho cambiar de idea. Esta película se merece un 10. De verdad, después de estar 90 minutos viendo esto, uno termina con el cuerpo totalmente dolorido de reírse tanto, de hecho la última media hora es especialmente dura porque ya te duelen hasta músculos que desconocías que existieran, y sin embargo sigues riéndote a carcajada limpia.
No hay ninguna terapia mejor que esta película para desconectar un poco del mundo real y entrar en el absorbente y delirante microcosmos que Inanç y Arkin nos regalan. Porque eso es lo que esta película es: un regalo para ver la vida con más optimismo que nunca, una experiencia casi religiosa. Una renovación completa, pues a la media hora de metraje es posible que ya no te queden más lágrimas que soltar de la risa. El cuerpo humano tiene un límite a la hora de reír, y esta obra lo pone a prueba. Mis más sinceros respetos para todas las personas implicadas en la elaboración de esta película. Sois mis ídolos, de verdad.