En una historia de la cual partes con aspiraciones muy altas, se queda corta. Quizás larga en exceso. Captan las escenas de los inicios de don Vito más que las propias de Al Pacino, lo cual ya deja que decir. No es merecedora de la misma puntuación que la primera, y sintiéndolo mucho, falta Marlon Brando. Aun así excelente rodaje y actuación, destacando por encima de todo la banda sonora.