La Jungla de Cristal del nuevo milenio. Bueno, podéis tirarme todas las piedras que queráis, es más, yo me las tiraría, porque sin ser un enorme fan de la película de Bruce Willis no hay color entre ésta y la anterior, y no nos engañemos, La Jungla de Cristal del nuevo milenio sigue siendo La Jungla de Cristal.

Dwayne Johnson hace lo que puede y su mera presencia ya me vale, qué le voy a hacer, incluso en una película donde se le desaprovecha tanto como es esta Skyscraper. Últimamente estamos teniendo un The Rock un poco más perezoso, con quizá demasiadas películas de relleno y directores que no sacan nada de partido a su portentoso carisma.

Más allá de esto, una trama insulsa, personajes insulsos, extraños reclamos innecesarios y una acción más de sobremesa que de gran sala de cine. Algo así como una película pseudo amateur para una vieja gloria del cine de acción en vez de un blockbuster con una estrella en alza. Supongo que todo actor de acción necesita estas películas relleno para si es posible hacer que sus grandes películas triunfen, pero la sensación de haber desaprovechado la inversión es más que palpable.