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davilochi rating:
9
7.4
42,867
Thriller
A powerfully graphic film (even though no violence is ever shown on the screen itself) about an Austrian family who goes on a country vacation and become the victims of two cold-blooded psychopaths who are out to torture them with their "funny games."
Language of the review:
- es
March 11, 2011
5 of 5 users found this review helpful
Haneke es un magnífico conocedor de la psique humana lo cual, sumado a su genial manejo de la técnica - la cual ha ido mejorando con los años - lo convierten en un auténtico genio de la cinematografía contemporánea, alguien que pasará a la historia por su concepción revolucionaria del séptimo arte.
Como viene siendo habitual en él en "Funny Games" lleva a cabo un análisis de la violencia que, desde luego, no dejará indiferente a nadie. Hay varias cosas que me interesan de esta película, es posible que la que más pueda atraer al público en general es la de cómo Paul y Peter pueden llegar a cometer los sádicos crímenes que llevan a cabo a lo largo de la película sobre la familia compuesta por Georg padre e hijo y Anna. Ya viene siendo una temática constante en el director austriaco el análisis de la crisis de la contemporaneidad derivada del modelo de sociedad en que hemos desembocado en los últimos veinte o treinta años. El hastío provocado en importantes sectores de la sociedad debido a la ausencia de estímulos y referentes lleva a la banalización de la propia existencia humana hasta el punto de hacer aceptables formas extremas de violencia como mecanismo de cohesión entre los individuos: estaríamos ante la comunión en torno a la violencia, por ejemplo.
Básicamente esto es lo que ocurre con Paul y Peter, dos niñatos pretenciosos unidos por su sadismo. Son interesantes los roles que juegan ambos: Paul es la materia gris del duo, alguien cuya magnífica actuación podría llevar a más de un espectador indignado a clavarle un cuchillo en el pecho en caso de encontrárselo en mitad de la calle, frío y calculador, tanto como asqueroso es en sus manifestaciones; en lo que respecta a Peter nos encontramos ante un sujeto sumiso aunque altamente inestable que se adapta a las propuestas y planes de su compañero. Si en ciertos momentos uno puede llegar a pensar que la tensión podría explotar en cualquier momento entre ambos al final de la película nos queda la duda de si acaso simplemente son roles que éstos se intercambian.
Como viene siendo habitual en él en "Funny Games" lleva a cabo un análisis de la violencia que, desde luego, no dejará indiferente a nadie. Hay varias cosas que me interesan de esta película, es posible que la que más pueda atraer al público en general es la de cómo Paul y Peter pueden llegar a cometer los sádicos crímenes que llevan a cabo a lo largo de la película sobre la familia compuesta por Georg padre e hijo y Anna. Ya viene siendo una temática constante en el director austriaco el análisis de la crisis de la contemporaneidad derivada del modelo de sociedad en que hemos desembocado en los últimos veinte o treinta años. El hastío provocado en importantes sectores de la sociedad debido a la ausencia de estímulos y referentes lleva a la banalización de la propia existencia humana hasta el punto de hacer aceptables formas extremas de violencia como mecanismo de cohesión entre los individuos: estaríamos ante la comunión en torno a la violencia, por ejemplo.
Básicamente esto es lo que ocurre con Paul y Peter, dos niñatos pretenciosos unidos por su sadismo. Son interesantes los roles que juegan ambos: Paul es la materia gris del duo, alguien cuya magnífica actuación podría llevar a más de un espectador indignado a clavarle un cuchillo en el pecho en caso de encontrárselo en mitad de la calle, frío y calculador, tanto como asqueroso es en sus manifestaciones; en lo que respecta a Peter nos encontramos ante un sujeto sumiso aunque altamente inestable que se adapta a las propuestas y planes de su compañero. Si en ciertos momentos uno puede llegar a pensar que la tensión podría explotar en cualquier momento entre ambos al final de la película nos queda la duda de si acaso simplemente son roles que éstos se intercambian.
SPOILER ALERT: The rest of this review may contain important storyline details.
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Spoiler:
Sea como fuere hay dos puntos interesantes en la película de Haneke (en realidad hay muchos): en primer lugar el modo en que la familia responde a la violencia que recae sobre ella, desde los ladridos premonitorios del perro al desconcierto de Anna ante el extraño comportamiento de Peter durante su primer encuentro, pasando por la reacción brutal del duo ante el soplamocos que Georg le propina a Paul. De forma progresiva se va a poner de manifiesto la impotencia del matrimonio y su hijo ante los acontecimientos que se van sucediendo sobre ellos, la frustración y la rabia acumulada por la más absoluta indefensión ante dos sujetos que actuan en base a presupuestos completamente arbitrarios desde el punto de vista de la razón. Y aún a pesar de que un buen conocedor de la filmografía de Haneke sabe que la película no puede seguir el curso natural que se esperaría de cualquier otra uno espera que de un momento a otro los acontecimientos se desaten en sentido favorable para la familia. Esto es lo que la convierte en una genialidad, que a pesar de todo el final sea hasta cierto punto impredecible: ahí queda ese lapsus de la conciencia de Anna a punto de tomar una decisión decisiva donde se ve a sí misma, en un momento de desesperación, tomando la escopeta y llevando a cabo una descarga de odio a través de los cañones del arma contra Peter. No obstante no es más que una cruel concesión del subconsciente de Anna ante una situación desesperada y parte del juego de Haneke con el espectador, tal y como hiciera en "Caché", donde llevará esa idea al extremo.
Y finalmente nos queda la reflexión contenida en la conversación final entre Paul y Peter en torno a la teoría de los universos paralelos con la que Haneke juega constantemente en sus películas: la posibilidad de que lo que ocurre en uno ocurra exactamente al contrario en sucesivos universos paralelos, que a cada toma de decisiones en un sentido se de una toma de decisiones en otro; es decir, que a cada yo se de la existencia de otro en un universo paralelo bajo unas condiciones diferentes. Lo que Haneke pretende destacar son las múltiples facetas y potencialidades de la psique humana, el lado oscuro de la naturaleza de todo hombre que podría surgir ante ciertas coyunturas.
Y finalmente nos queda la reflexión contenida en la conversación final entre Paul y Peter en torno a la teoría de los universos paralelos con la que Haneke juega constantemente en sus películas: la posibilidad de que lo que ocurre en uno ocurra exactamente al contrario en sucesivos universos paralelos, que a cada toma de decisiones en un sentido se de una toma de decisiones en otro; es decir, que a cada yo se de la existencia de otro en un universo paralelo bajo unas condiciones diferentes. Lo que Haneke pretende destacar son las múltiples facetas y potencialidades de la psique humana, el lado oscuro de la naturaleza de todo hombre que podría surgir ante ciertas coyunturas.