Con un ritmo sostenido y con ese ruido de que en cualquier momento va a estallar algo, transcurre este film en donde el ritmo y las actuaciones de los cuatro personajes principales aumentan la puntuación final. La trama gira alrededor de un joven de color, quien es la estrella de un colegio secundario, quien ademáss tiene una historia traumatica ya que es originario de un país africano adoptado a partir de los 10 años por una familia estadounidense que tiene todas sus esperanzas puestas en él. El problema surge cuando la profesora de historia observa un comportamiento extraño a partir de la solicitud de un trabajo y de un hallazgo en el casillero del joven, es por esto que comenzará un juego del gato y ratón en donde absolutamente nadie saldrá indemne. Empezarán las dudas, la desconfianza, las mentiras y los miedos de todos. Entre las actuaciones como dije se destacan Naomi Harris como la abnegada madre que protegerá a su hijo de todo, Octavia Spencer (como la traumatica profesora), Kelvin Harrison Jr (el estudiante, quien con gestos le basta para decir lo que piensa o no) y Tim Roth quizás el que menos influencia tenga de los cuatro pero caracterizando con soltura su papel. Quizás como elemento negativo tenga que quedan cosas libradas a la imaginación del espectador y que deberían haberse resueltos. Pero no opaca el hecho que es un film que merece verse.