Hay infinito machirulismo en algunas de las críticas que he leído en esta web. Estoy segurísimo que si Paula Ortiz no fuese una mujer algunas de ellas no incurrirían en ese asqueroso paternalismo de 'chica, dedícate a otra cosa' con el que me he encontrado.
El dbut de la directora no es malo, es solo tremendamente pretencioso (como su segunda película) y muy cursi (esos planos de Leticia Dolera en el bosque duelen, duelen mucho) pero las historias que narra son genuinamente emocionantes y están excelentemente interpretadas. Sobran también esos coros en la banda sonora que recuerdan muy mucho a los de Lisa Gerrard en la música de 'Gladiator'.