Magnífica serie, que si bien no inventa nada logra elevar el listón de las comedias de TV de hoy en día una barbaridad, proporcionando un humor efectivo (no inteligente, pero tampoco vacuo como quieren vendernos algunos) y una calidad acorde con el éxito que está cosechando.

En mi opinión, lo que hace grande a todas las comedias son sus actuaciones. Las situaciones podrán ser descabelladas o irreales, pero si los actores cómicos tienen talento el resultado es positivo. Por eso la comedia es tan difícil y siempre se dice eso de que "es más difícil hacer reír que llorar". Estoy de acuerdo, y es aplicable a las series cómicas.

Modern Family posee un elenco de actores estupendos, que dotan de una vitalidad extraordinaria a los personajes que interpretan, haciéndonos creer capítulo a capítulo que son seres reales que viven en la realidad. Por muy fantasiosas e irreales que sean algunas situaciones (que muchas lo son) el buen hacer de los protagonistas salva los posibles vacíos de realidad del guión, o las situaciones tópicas.

En cada capítulo, cada cual remata su historia con maestría, y cuando se juntan todos por razones de comidas familiares o eventos comunes la cosa se convierte en un portento de calidad interpretativa. Y es que si de algo puede fardar esta serie es de actores, todos y cada uno de ellos fantásticos. Después, podemos hablar de los geniales diálogos que en boca de los ya citados intérpretes son oro puro, de las divertidas situaciones, del buen trabajo del director...

Es cierto que esta serie no inventa nada, pero cumple su cometido con creces en mi caso, que es el de entretenir y hacer reír a carcajadas. Una maravilla que esperemos que no devalúe en el futuro con un exceso de temporadas.