Pretensiones:
Enredados y Rompe Ralph me encantaron por lo cual era difícil que esta cinta no me encantase y más teniendo en cuenta que últimamente Disney me está sorprendiendo mucho para bien pese a que tenga por ahí suelta la horrenda Marte necesita madres. Esperaba un producto Disney a la altura de las dos primeras citadas y esperando algo grande me lo he llevado, tanto que me ha parecido la mejor cinta de animación del 2013.
Puntos positivos:
Desde el punto de vista visual es asombrosa y en cuanto a guión se refiere también ya que el mensaje que transmite de no te fíes del amor a primera vista o el amor familiar y dejar en segundo plano el romance típico Disney es algo que hay que valorar y mucho. Hay princesas, muchas canciones y por supuesto personajes enternecedores y carismáticos y eso es de agradecer. Sus canciones son pegadizas y no se hacen pesadas como en otras cintas donde el aburrimiento forma parte de ella sin embargo aquí emocionan y llegan al corazón y me da igual haberla visto doblada que en versión original sé que ambas versiones con las canciones serán maravillosas. El guión se maneja bien de una forma imprevisible al igual que ya lo hiciera Monstruos University el verano pasado con un giro de guión de los que no suele haber en otras cintas de animación ajenas al universo Disney. El ritmo es muy bueno y se pasa volando la cinta con una hora y media de diversión, aventuras, amor y mucho humor.
Puntos negativos:
Si bien no es una cinta redonda pero se le acerca tiene algún que otro punto débil como el giro de guión que no sea tan creíble para muchos dejando algún que otro agujero en el tintero pero tampoco lo tengo mucho en cuenta sabiendo que lo pasas en grande y no es tan fácil darse cuenta de esos errores.
Resolución final:
Una cinta de animación divertidísima bien manejada con un guión notable y con personajes bien aprovechados con mucho humor, amor, tristeza, soledad y alegría. Mantiene los ingredientes que suele trasladar Disney a sus películas aunque en esta ocasión evita el primer plano del típico romance para seguir manteniéndolo pero a una escala menor. Recomendable.