La casualidad pone en la pista a dos policías de una caja fuerte que se encuentra ubicada en una nave industrial sin ningún tipo de vigilancia, por lo que se ponen de acuerdo para robarla.

Con el fin de obtener la financiación necesaria para llevar a cabo su plan y obtener el material imprescindible para el robo, van realizando actos criminales de corrupción que ponen en duda su moralidad e incluso su relación, que era más de dependencia, que de amistad, y una vez con todo preparado, se ponen manos a la obra para realizar el golpe, que como casi siempre, tiene dificultades inesperadas que deben arrostrar hasta su consumación.

Thriller que nos habla de corrupción policial y de la preparación de un plan de robo y la ejecución del mismo, guión que hemos visto en múltiples películas de los últimos tiempos y que cuenta con el favor del gran público.

Ésta además tiene como reclamo su pareja protagonista, un Nicolas Cage que a pesar de ser criticado en todas y cada una de sus películas, sigue manteniendo su tirón entre el público, y un Elijah Wood que parece que se ha quedado encasillado en su papel del universo Tolkien y al que le está costando salir del mismo al no interpretar o papeles de éxito desde que le dió vida a Frodo.

Película con matices genuinos y un final poco previsible. Notable, 7.