'Paterson' ya juega con el espectador desde el principio donde la película se llama 'Paterson', el protagonista se llama 'Paterson' y la ciudad donde vive el mismo se llama 'Paterson'.

Ya de por sí resulta curioso y te quedas ciertamente embaucado por lo extraño y a la vez llamativo que rodea a ese personaje, esa ciudad y en sí el aura de la película.

Entiendo perfectamente que a muchos no les haya gustado y es que 'Paterson' (película, persona y lugar) es una representación exacta de la vida de una persona en el transcurso de una semana. Cómo se levanta cada día a la misma hora, tiene sus manías a la hora de despertarse, va a trabajar, escribe poemas en sus ratos libres (poemas que ciertamente a mí me hicieron reír en un inicio y que luego, como bien dice el propio protagonista, más tarde vi su "rima interior"), vuelve del trabajo, coloca el buzón como debe (siempre torcido), habla con su novia, saca al perro, se bebe su cerveza en el bar y vuelve a casa a dormir. Vuelta a empezar.

En resumen: la vida. Lo cotidiano. La monotonía.

¿Qué puede molestarte de esta película? Precisamente esto. La repetición continua de todas las cosas que una persona corriente hace. Pero por otro lado, hay pequeños cambios. Y como dicen por ahí "cuando hay cambios, todo explota." Por eso a muchos le asustan. El film juega continuamente con pequeños detalles psicológicos que trastornan al espectador. Te hace pensar, en mi caso (he de decirlo) de más porque llegué a darle una explicación que creo que va más allá de lo que quiere decirnos el director.

Y es que a fin de cuentas todo vuelve a su cauce. La vida golpea, pero hay que ser capaz de levantarse. Y ése es el encanto de la película. Te ves reflejado en ella y resulta molesto, pero a la vez tiene su encanto.

Porque... quiénes seríamos nosotros sin nuestras manías, sin besos matutinos a nuestras parejas, sin nuestra cerveza fría, sin el paseo de nuestra fiel mascota. Nada.

Y entonces termino la película y digo: "Cáspita, qué sensación es ésta." Pues os lo diré. Mientras vi el film me di cuenta de que yo también soy Paterson. Poético, ¿verdad?