Sostenida en una obra de Tennessee Williams y en las descomunales interpretaciones sobre todo de Marlon Brando y Anna Magnani (sin olvidarnos de una joven Joanne Woodward), Piel de serpiente es una película áspera, fría, cargada de atracción entre l@s protagonistas, aunque todo sea más insinuado que obvio, y el resultado, de la mano de Lumet (en uno de sus primeros trabajos), es sobrio, trágico y muy teatral, como no podía ser de otro modo, siendo un texto del afamado dramaturgo.