Click here to copy URL
United States United States · Bon Temps (Louisiana)
RandolphCarter rating:
5
Horror A remake of the 1985 cult classic. Teen Charlie Brewster's (Anton Yelchin) beginning his senior year of high school and things are finally falling into place: he's grown a few inches, gained a few pounds and he’s now dating the most coveted girl in school. But trouble arrives when Jerry (Colin Farrell) moves in next door. He seems like a cool guy, but beneath the surface, there’s something off about him – something intimidating. And ... [+]
Language of the review:
  • es
September 12, 2011
42 of 53 users found this review helpful
Otro remake para el verano, en esta ocasión, la revisitación de un pequeño clásico ochentero de culto: la estupenda “Noche de miedo” (Tom Holland, 1985). El resultado es bastante inferior al original, pero como ejemplo de cine de evasión palomitera, no es de lo peor que hay en cartelera. Tampoco es una mera fotocopia modernizada, sino que coge algunos elementos y cambia muchos otros para crear su propia identidad, desgraciadamente demasiado alejada en virtudes de aquella.

Y el principal problema de esta “Noche de miedo” del siglo XXI es que al contrario que el film original, miedo, lo que se dice miedo, no da ninguno. Se deja ver y es suficientemente entretenida para pasar el rato, pero en ningún momento provoca escalofríos; más bien es una aventurilla tenebrosa, moderadamente sangrienta y rebozada con cantidades de humor más o menos afortunado, así que olvídense de saltar en el asiento porque los sustos son más bien escasos.

Para ser un producto de multisalas no está mal rodado, algunas escenas demuestran que la propuesta está mejor elaborada de lo que parece a simple vista (ver el ingenioso el plano-secuencia del coche al respecto) y tiene el aliciente, raro hoy día en films del género, de una cantera de actores que cumple con oficio su cometido, desde el atribulado protagonista Anton Yelchin, pasando por el excéntrico David Tennant como el viciosillo y cachondo ilusionista Peter Vincent, hasta un Colin Farrell que se lo pasa teta como vampiro chulillo y molón, chupando cuellos ajenos sin mancharse su camiseta imperio.

Aprobado justito para un divertimento simpático al que paradójicamente le falta algo más de mordiente, aunque por lo menos trata de restablecer a la tenebrosa figura del vampiro como monstruo despiadado, alegato anticrepusculiano incluido, en detrimento de tanto chupasangres descafeinado con acné que se nos vende hoy día… ¡Me cago en la MTV!
RandolphCarter
Did you find this review interesting and/or helpful?
arrow