FA
Collaborator
Average rating
5.8
Ratings
7,718
Reviews
148
Lists
62
Movie recommendations
- Ratings by category
- Contact
-
Share his/her profile
Vfoul rating:
8
7.9
7,180
Drama
Robert Stroud (Burt Lancaster), a murderer sentenced to Alcatraz, cures a sick bird that flies into his cell and eventually becomes a world-renowned ornithologist -- all while serving a life sentence.
Language of the review:
- es
June 26, 2009
76 of 86 users found this review helpful
En el “El hombre de Alcatraz”, John Frankenheimer nos ofrece un relato humanista, sobre cómo lograr mantener la dignidad en la vida carcelaria a través de la transformación del preso Robert Stroud, estupendamente interpretado por un inconmensurable Burt Lancaster, seguramente en uno de los mejores trabajos de su vida cinematográfica. Con una selecta compañía de secundarios como Kart Malden, Telly Savalas, Thelma Ritter, Neville Brand y una excelente composición musical del gran Elmer Berstein.
Robert Stroud quizás se hubiera vuelto loco a la larga, pero un cierto día dando su solitario paseo por el patio bajo una fuerte tormenta, se encuentra una cría de gorrión que necesita cuidados…aquella pobre vida en sus manos cambia su manera de ser, quizás el hacer algo útil y bueno, además es la única forma de vida de la cárcel que le corresponde con cariño desinteresado, una vida de pájaro, libre de ir donde sea, puro y limpio para él, que no ha conocido más que maldad y crueldad. Poder cuidar de ese pájaro quizás es trascender esos muros de hormigón, cuidar de esa parte de libertad que él no tiene, es hacer llegar algo de sí mismo más allá de los muros y alambradas…. predecible que el pajarillo prefiera la cómoda estancia de la cárcel antes de la ruda vida afuera: propio de muchos exconvictos que vuelven a delinquir solo para volver a la (para ellos) acostumbrada seguridad de la prisión.
Como se dice en la película, la cárcel no devuelve la dignidad a un hombre, solo puede hacerse digno así mismo siendo (y sobre todo sintiéndose) realmente útil a la sociedad, la cárcel sólo le quita la libertad y su dignidad dándole un número de preso.
Robert Stroud quizás se hubiera vuelto loco a la larga, pero un cierto día dando su solitario paseo por el patio bajo una fuerte tormenta, se encuentra una cría de gorrión que necesita cuidados…aquella pobre vida en sus manos cambia su manera de ser, quizás el hacer algo útil y bueno, además es la única forma de vida de la cárcel que le corresponde con cariño desinteresado, una vida de pájaro, libre de ir donde sea, puro y limpio para él, que no ha conocido más que maldad y crueldad. Poder cuidar de ese pájaro quizás es trascender esos muros de hormigón, cuidar de esa parte de libertad que él no tiene, es hacer llegar algo de sí mismo más allá de los muros y alambradas…. predecible que el pajarillo prefiera la cómoda estancia de la cárcel antes de la ruda vida afuera: propio de muchos exconvictos que vuelven a delinquir solo para volver a la (para ellos) acostumbrada seguridad de la prisión.
Como se dice en la película, la cárcel no devuelve la dignidad a un hombre, solo puede hacerse digno así mismo siendo (y sobre todo sintiéndose) realmente útil a la sociedad, la cárcel sólo le quita la libertad y su dignidad dándole un número de preso.
SPOILER ALERT: The rest of this review may contain important storyline details.
View all
Spoiler:
La lástima es que la historia de Robert Stroud no fuera exactamente como se describe en la película, porqué realmente era un tipo bravucón, problemático, arisco y pendenciero con sus compañeros de prisión y tuvo muchos altercados, además algunos equipos de laboratorio que usó (para sus estudios) muchas veces fueron servidos para destilar alcohol.