Por fin he podido visionar "Viudas (Widows)", adaptación de una serie británica, dirigida por Steve McQueen (que se llevó el Oscar a mejor película, que no director, por la olvidada "12 años de esclavitud"), y con rostros tan populares como los de Viola Davis, Liam Neeson o Colin Farrel.

La película fue aplaudida por la crítica, pero también fue un sonoro fracaso de taquilla, ya que no interesó a casi nadie, y de ahí que se hayan olvidado de ella en los próximos Oscars, porque ya sabemos que esos premios premian la popularidad, al menos en los últimos años.

Pues bien, qué decir de este drama con tintes de thriller. Pues poca cosa, la verdad, ya que me ha dejado bastante frío. Pero, como siempre, vayamos por partes. La dirección de McQueen es muy superior a la de su anterior trabajo (por el que fue nominado, mientras que en esta ocasión ni se han acordado de él, curioso cuanto menos), y nos regala un gran trabajo, con planos bastantes interesantes (como el del coche) y escenas de acción logradas (aunque sean pocas).

Por otro lado, el guion también es cosa suya (junto a otro colaborador), y quizás sea lo más endeble de la cinta, ya que la película peca de aburrida, lenta, larga y algo caótica, ya que hay demasiados personajes. Por ejemplo, juntan dos tramas, la política (a priori bastante interesante), que protagoniza, entre otros, el bueno de Colin Farrell, con el thriller de robos protagonizado por Davis y sus compañeras de reparto.

Uno no sabe muy bien qué nos quiere contar el director con este extraño híbrido, con tintes raciales, plagado de personajes y totalmente predecible. Lo que es seguro es que a la película le sobra media hora, siendo generoso.

Respecto al reparto, tenemos a una comedida Viola Davis, en un papel que no es el mejor de su carrera, desde luego. Demasiado fría y distante, pero supongo que es culpa del personaje que le han dado. Por ahí, también se pasea brevemente Liam Neeson. Vale. Por otro lado, tenemos a actores de la talla de Colin Farrell o Robert Duvall, con interpretaciones poderosas, como suele ser costumbre en ellos. A destacar la ascendente Elizabeth Debicki, en un papel nada fácil y del que sale airosa. El resto del reparto, correcto, sin más.

Y por cierto, la banda sonora es del genio llamado Hans Zimmer. Debe ser el encargo de un amigo y ese día le daba pereza trabajar, porque me he quedado igual que como he empezado, al acabar la película. Increíble.

En conclusión, estamos ante un thriller denso y sin ritmo, lastrado por sus pretensiones, en un conjunto carente de garra. ¿Es una mala película? No lo creo, pero tampoco es nada del otro aquel y no os perdéis nada. Para mí, un producto fallido y pretencioso.

Más críticas: ocioworld.net