Justo tres años después de su última obra "Misión imposible", el legendario director de "Scarface", Brian de Palma, acompañado en labores creativas por el también cineasta y sobre todo guionista de prestigio, autor entre otros guiones de "Jurassic Park", Spiderman", "Misión Imposible" ó "La guerra de los mundos", David Koepp, firman esta floja película que fue un rotundo fracaso de crítica y público en el momento de su estreno...

Iniciada con ese famoso y sobrevalorado plano secuencia inicial de 27 minutos en el interior del "The Powell Millenium" (en realidad se trataba del Montreal Forum, lugar de juego en la liga NHL de hockey sobre hielo norteamericana de los Canadiens de Montreal y en aquel momento en reformas), una especie de conglomerado empresarial con sala para eventos deportivos, y un hotel con sala de juegos...algunos han cometido el sacrilegio de comparar incluso dicho plano con aquel otro legendario del "Sed de mal(Touch of evil)" de Orson Welles...¡Vamos ni de coña!...

La película efectivamente comienza de manera magistral con ese meritorio plano secuencia, trepidante, sin ningún resquicio para la tranquilidad, donde se van perfilando a la vez aunque de forma difusa (salvo el papel de Rick Santoro interpretado por Nicolas Cage) los caracteres de los distintos personajes...

La narración hasta entonces genial y con el inconfundible sello dipalmiano, con unos excelentes planos secuencia como el majestuoso inicial, o las típicas y depalmianos divisiones de pantallas en varios planos (split screen) que narran de manera simultánea o mediante flash backs la acción...

Sin embargo la trama flojea por todos los lados como si el proyecto apremiara a De Palma, convirtiendo el conjunto en una olla agujereada que dejara escapar un estupendo caldo...a pesar incluso de que pareciera como si De Palma se diera cuenta de ello e intentara remendar las prisas con intentos de fusilamiento de partes de su excelente "Carlito´s Way"...sin comentarios...

El personaje de Nicolas Cage comienza de manera prometedora para ir diluyéndose como un azucarillo en agua... y ¡qué contar del patético personaje del capitán de fragata y amigo de infancia de Rick, Kevin Dunne(Gary Sinise)!, una especie del malo de terminator con una parte en la trama de patética para arriba...

Lo único que salvaría de esta película y que, ¡créanme es mucho tal y como está hoy el panorama cinematográfico universal!, es ese por lo menos intento de ejercicio estiloso de cine elegante, sello inconfundible de la marca Di Palma, y que tantos buenos ratos de cine nos ha hecho pasar...

Utilizando el símil en el juego de dados que da título a la película; los dados dan ojos de serpiente...La banca gana señor De Palma...

D E C E P C I O N A N T E.