Conocido el racismo negro antiblanco de Peele era obvio que los malos van a ser los blancos y los buenos los negros. Por supuesto, ella como blanca, también es una villana, de esto no hay ninguna duda, sospechamos a las primeras de cambio.

Hay varios errores, por ejemplo, la caja con las fotos de la chica para que todos sepamos que es mala, ahí colocada con una puerta abierta no se sabe por qué. De igual modo, antes, se me hace muy raro que el chico no le muestre a ella lo perturbador del comportamiento de los sirvientes negros. Y no lo hace para que no se desvele que es también una cómplice. Tampoco tiene sentido que haya una especie de subasta en vez de encargar a la víctima directamente. Ah, se me olvida el final, con ese protagonista que ni sedado, ni atado, ni nada se quieren llevar mientras al otro le están sacando el cerebro, que digo yo que deberían estar los dos ya en la sala de operaciones, ¿no? Qué inútiles los malos. Pero lo más grave es, ¿Por qué narices montan el paripé de un noviazgo de cuatro meses, una visita de varios días, hipnosis, vídeos y explicaciones? ¿Por qué no lo secuestran como hacen al principio con el caminante? Pues porque si no, no tendríamos película. Pero es una chorrada.

Lo peor es que nuestro director se desata argumentalmente con una fantasía racista según la cual el negro es superior al blanco en todas las facetas de la vida, de tal modo que esto genera una envidia a partir de la cual los blancos queremos ser negros. Sólo a partir de esta premisa puede adquirir algo de sentido una idea que tal y como está formulada es una estupidez. Resulta que las víctimas son todas negras y los compradores todos blancos, menos un japonés. No hay latinos, árabes ni otras minorías representativas. ¿Por qué? ¿Por qué no existe variedad étnica en uno y otro lado? Es más, ¿Por qué la inmensa mayoría de los conejillos de Indias no son blancos teniendo en cuenta que los originales también lo son y lo normal es que preferirían seguir conservando su misma raza? Pues porque los blancos somos malos y además envidiamos a los negros porque es la raza superior, genética, biológica, física, estética, moral e intelectualmente. Se supone que lo relevante son las habilidades que desean adquirir no el color de la piel pero "casualmente" estas habilidades se encuentran solamente en los afroamericanos. Por ejemplo, que el abuelo, envidie a los corredores negros es lógico. Pero, ¿la abuela? ¿Por qué quiere ser negra? Tendría sentido que ella siendo blanca y se supone que racista, prefiriera usar un cuerpo blanco. Pero no, también es negra. ¿Para qué? Pues para denunciar a los blancos y dejar patente la superioridad negra y la envidia que nos genera. Vete por ahí, Peele.