De nuevo una gran idea es desperdiciada por un desarrollo equivocado. Si la primera mitad de "¿Otra vez tú?" se mantiene con alfileres, en la segunda asistimos con una mezcla de hastio, incredulidad y hostilidad a su desmoronamiento cinematográfico. La película promete con una rivalidad doble entre la hermana del novio y la prometida, más la de la madre y tía de las respectivas. Pero esta historia pide a gritos que sean enemigas de verdad, para lo cual Joanna (Odette Yustman) y Mona (Sigourney Weaver) tienen que ser, dejémoslo en malillas pero sólo un poco, que la primera es muy guapa y la segunda se conserva estupendamente. Por eso esperas a que de una vez se quiten las máscaras y que la cosa estalle por fin pero esto no pasa nunca. La clave es que en realidad no se trata de una comedia sino de un drama, si bien con algunas pinceladas de humor.

A lo dicho hay que añadir que a la película le falta coherencia. De hecho el "gran descubrimiento" del final lo ha revelado Joanna en la cena del principio. Tampoco es muy limpio fingir que es una cosa para confundir al espectador. Pero me interesa resaltar un punto. He leído que "¿Otra vez tú?" es misógina y machista, sin que se explique por qué lo es, cuando lo primero que hay que saber para lanzar esta acusación es qué significa una cosa y la otra, lo que rara vez pasa. Aunque no lo crean, es igualitaria. Es cierto, las mujeres de esta obra se contorsionan, suplican y lloriquean por los hombres, además de ponerse en ridículo. Pero como es obvio eso no quiere decir que sea sexista. Lo sería si sólo viéramos en situaciones así a las mujeres, cosa que es falsa. Por ejemplo, "Doce fuera de casa" (2005) es muy similar pero con varones compitiendo como tontos.