Click here to copy URL
Sandro Fiorito rating:
9
Drama. Comedy Set in 1948, a professor of music, Clement Mathieu, becomes the supervisor at a boarding school for the rehabilitation for minors. What he discovers disconcerts him--the current situation is repressive. Through the power of song, Clement will try to transform the students.
Language of the review:
  • es
March 2, 2010
19 of 19 users found this review helpful
Ésta es una de esas pequeñas joyas que con el tiempo se van olvidando y merecen ser rescatadas del baúl de las cintas más injustamente tratadas. Hay quien tiene la desfachatez de tacharla de 'sobrevalorada' cuando desde sus escenas, claramente humildes, se refleja la intención de hacer una buena película con un gran mensaje, que no pretende arrasar en ninguno de los festivales de premios más importantes, en los que claramente fracasó, pero que desde luego triunfa en la lógica y los corazones de los que comprendemos y sentimos lo que desde su expresión fílmica se transmite.

Gérard Jugnot hace una interpretación de Oscar en esta grandísima película que con lírismo lleva al espectador una historia con un mensaje claro: los métodos drásticos y autoritarios no siempre son eficaces y desde luego, los que se aplicaban en la ficticia escuela de esta película, eran un completo fracaso. Llega un pobre hombre como vigilante de los desventurados chavales, que vagan tristes por la escuela sin oficio ni beneficio, trasteando y maleducándose por las ansias de libertad que les produce precisamente la privación de la misma, y se hace con el control de todos ellos desde los compases que él mismo crea gracias a sus conocimientos al haber sido profesor de música. No sólo dirige el coro que consigue crear, si no que los lleva a todos a su redil y comprueba, ante la rabia del que se sabe inútil, que es el director, cómo a los niños les brillan los ojos, les cambia la vida y comienzan a dejar de lado todos los vicios adquiridos por culpa del sistema "acción-reacción".

El conjunto de la película es agradable y de gran belleza, y su música una delicia para los oídos.
Sandro Fiorito
Did you find this review interesting and/or helpful?
arrow