Warner Bros decide tirar para delante y, en lugar de liberar el verdadero montaje de 'Liga de la justicia', presenta a un superhéroe más para la familia del universo DC; aunque aún sigo esperando el montaje de Zack Snyder, compro por ahora lo que ofrecen.

Con 'Aquaman' ofrecieron un espectáculo sólido demostrando que cuando dejan hacer a los creativos dan productos de calidad. Con '¡Shazam!' no hay una mejoría monumental, incluso empeora un poco el nivel post 'Liga de la Justicia', pero parece que por fin están centrados en los estudios. Esta cinta no pasa de ser la típica cinta de origen de superhéroes con el bautismo en forma de primer villano (gran elección el de Mark Strong, redimiéndose del anterior colaboración 'deceita' con 'Linterna Verde') que cumple, si bien da la sensación de que aún le falta subir algún escalón para haber sido uno de los grandes villanos del universo DC.

Era obvio, por los tráilers y por el espíritu del personaje, que esta película iba a ser menos seria que otras del mismo universo, y no es realmente un problema; esta vez forma parte de forma natural y no forzada, salvo algún que otro chiste. Cuidado, eso sí, con según que escenas para los niños porque tiene alguna escena inesperada que roza el género del terror.

Para vender palomitas se basta solo, no se le puede pedir peras al olmo tampoco viendo los nombres envueltos en el proyecto que no son un Zack Snyder o un Ben Affleck, sin embargo han conseguido seguir solidificando un universo que pedía la extremaunición y, por ahora, no empeora del coma.