Average rating
6.4
Ratings
4,221
Reviews
702
Lists
12
Movie recommendations
- Ratings by category
- Contact
- Social Networks
-
Share his/her profile
Taylor rating:
3
Language of the review:
- es
September 16, 2010
30 of 39 users found this review helpful
¿Saben aquel que diu que se encuentran dos amiguetes y uno le dice al otro: “En Brasil sólo hay putas y futbolistas” ¿No lo saben? Pues bien, cuando el otro le contesta “Oye, un poquito de respeto, que mi mujer es brasileña” el metepatas le responde ipso-facto “¿Y en qué equipo juega?”
Pues eso, que a ese chiste me recordó esta peli. Pero coñas aparte, pobres brasileiros. Ya da igual que aparezcan en una peli buena (“Ciudad de Dios”), medio buena (“Tropa de Élite”) o rematadamente mala (ésta). El caso es que a ellos siempre nos los pintan como viciosos, delincuentes, camellos o yonkis y a ellas, como putas. Irremisiblemente. Sobre todo si la peli es americana. Como ésta. Pero bueno, qué más da. Por mucho que la industria cinematográfica estadounidense siga dándonos la brasa con la típica y tópica historia del ingenuo turista yankee que se mete en mil y un fregaos y acaba salvando el culo por los pelos, pocos espectadores con dos dedos de frente quedarán -digo yo- que continúen tragándose milongas así.
La peli de Stockwell, en cualquier caso, es un bodriete. Que quede claro. Y lo es porque desaprovecha un entramado argumental a priori interesante (el tráfico de órganos vitales) en pos del típico slasher visto una y mil veces en el que lo único que prima es la típica persecución del malote de turno a la pibona de turno. Esta vez bajo el agua y en tanga.
Trillada, xenófoba e inconsistente peli, pues, que jamás se me ocurriría recomendar a nadie. Y menos a ningún susceptible e hipocondríaco amiguete que estuviera planificando unas posibles vacaciones en Brasil. Por si acaso…
Pues eso, que a ese chiste me recordó esta peli. Pero coñas aparte, pobres brasileiros. Ya da igual que aparezcan en una peli buena (“Ciudad de Dios”), medio buena (“Tropa de Élite”) o rematadamente mala (ésta). El caso es que a ellos siempre nos los pintan como viciosos, delincuentes, camellos o yonkis y a ellas, como putas. Irremisiblemente. Sobre todo si la peli es americana. Como ésta. Pero bueno, qué más da. Por mucho que la industria cinematográfica estadounidense siga dándonos la brasa con la típica y tópica historia del ingenuo turista yankee que se mete en mil y un fregaos y acaba salvando el culo por los pelos, pocos espectadores con dos dedos de frente quedarán -digo yo- que continúen tragándose milongas así.
La peli de Stockwell, en cualquier caso, es un bodriete. Que quede claro. Y lo es porque desaprovecha un entramado argumental a priori interesante (el tráfico de órganos vitales) en pos del típico slasher visto una y mil veces en el que lo único que prima es la típica persecución del malote de turno a la pibona de turno. Esta vez bajo el agua y en tanga.
Trillada, xenófoba e inconsistente peli, pues, que jamás se me ocurriría recomendar a nadie. Y menos a ningún susceptible e hipocondríaco amiguete que estuviera planificando unas posibles vacaciones en Brasil. Por si acaso…