Parece que es un subproducto infumable al menos por su apariencia de telefilm quita insomnio. Además de ello, el subproducto aún no ha sido votado, y seguramente no recibirá críticas a menos que a algún valiente le haya dado por verla en su emisión en el canal divinity a unas horas intempestivas.
Se trata del típico producto navideño que narra con mucho oficio y gran sentimentalismo (ternura, perdón y lucha por conseguir lo que uno quiere sin arrojar la toalla frente a la adversidad son tres pilares) la amistad que se cierne entre un chaval y un perro, para dejarnos ver como escenario de fondo la bondad de las personas en momentos en que todos somos muy buenos, en navidad, y cuenta con buenas intenciones, moralina por un tubo, estas cosas que ya sabemos.
Pese a todo, lo digo, la película se deja ver bastante bien, cuenta con actores competentes, una música excesivamente meláncolica que hace que el liviano dramatismo parezca más dramático de lo que es realmente, un historia sencilla pero atrayente, y sobretodo me resulta interesante porque con el frío que hace hoy se apetece ahorrar energía con el contexto navideño presente, a buen seguro que si la emiten por la tarde más de uno se llevará una pequeña sorpresa con este telefilm canadiense por encima de la media dentro de sus limitaciones.