Desde la primera escena en la que aparece queda claro que Diana es apenas un álter ego apeas disimulado de la propia María Félix, el personaje habla, camina y sobre todo piensa como ella, dice lo mismo que hubiera dicho María y estoy seguro que los guionistas consultaron cada parlamento con ella para que diera su visto bueno, es una película para su lucimiento, creo que la última donde interpretó un personaje del presente, las otras 2 películas posteriores serían en historias de época.
El gran problema de la película es que la única que brilla es ella, y su brillo opaca al resto, incluso a Julio Alemán, un muy buen actor que acá está pésimo, para la psicología que maneja su personaje era complicado no sobreactuar y por desgracia él no lo consigue. El resto del elenco igual, todos recitando sus parlamentos, la que interpreta a la antagonista, Laura Garcés es nula, nuca más volvió a actuar y por suerte, la verdad, la chica no tenia ningún talento, y es obvio que María Félix la eligió para que en ningún momento le fuera a hacer sombra.
Supongo que fue un trabajo de encargo para Luis Alcoriza, porque no hay nada de él en ella, ni siquiera la escribió, cosa que se nota, porque le falta el ingenio para la trama y el oído para los diálogos que tenía él.
Igual la película se deja ver, es una anécdota de María Félix hecha película, tal vez en parte sea una dramatrización basada en algún relación suya.
Yo creo que hubiera dado para mucho más, pero bueno la hicieron con un propósito y ese se cumplió.