La película puede que sea algo infantil en algunas partes del film, pero más que infantil en mi opinión son momentos tiernos y preciosos, y más para mi que estoy toda mi vida viendo Toy Story desde pequeño, ya que realmente me he criado con ella, hasta llevo la misma edad que el protagonista Andy en esta tercera entrega cuando la ví.
Lo bonito de la pelicula es de que sigue el mismo estilo y magia de las anteriores dos partes, y durante el transcurso no se te hace ni mucho menos pesada porque continua las aventuras y vivencias de esos carismáticos personajes que son Woody y Buzz y compañía.
Si es el final de la franquicia mejor porque no necesita más, es un final definitivo y realmente bonito para todos los personajes que abordan esta maravillosa historia.