Un "thriler" y un "road movie" de violencia, sangre, sexo, locura y muerte, con toques de canto y música, basada en una novela: "Wild At Heart: The Story Of Sailor And Lula", de Barry Gilford. Sailor Ripley (Nicolas Cage) mata a un hombre en defensa propia y va a prisión por tres años, Lula Peace Fortune (Laura Dern) lo espera y escapan en auto a California desde su pueblo en la frontera de las dos Carolinas, perseguidos por los matones que la madre de Lula, Marietta Fortune (Dianne Ladd, la madre de Lula en la vida real, de modo que las dos son parecidas) manda para matar a Sailor pues éste conoce un crimen que ha cometido. Una película desagradable y a menudo sin sentido, en que los personajes no pueden actuar sin fumar (se diría que en Cannes el jurado estaba borracho). El filme se interesa más en ser extraño que en tener sentido, tiene escenas que hay que aguantar esperando que pasen pronto pues no aportan nada a la historia y para no caer en el aburrimiento.