El descenso

Neil Marshall es un director que me gusta, con buenas propuestas, ésta es quizás, de su aún corta carrera, la más celebrada y recordada, estrenada en un momento clave, donde las nuevas películas de terror que iban saliendo eran demasiado convencionales (salvo excepciones, por supuesto), y estaban muy trilladas, ésta sin ser realmente original dio un soplo de calidad y aire fresco al género, con una trama sencilla pero eficaz y atractiva.
Un grupo de 6 amigas se van de espeleología a buscar emociones fuertes, en la oscuridad de un sistema de cuevas, algo saldrá mal, y les lloverá todo un infierno de criaturas que ahí subsisten perfectamente adaptadas a su entorno en perpetua oscuridad, las chicas lucharán por su supervivencia, el guión es lo más simple del mundo, pero está bien elaborado, la atmósfera de la película es en todo momento agobiante, y las criaturas tanto en diseño como en su comportamiento, muy interesantes, y bien caracterizadas, las chicas hacen un buen trabajo y el director también, con algunas secuencias muy conseguidas, y generosas dosis de gore, es muy sangrienta, siendo en ocasiones muy bizarra.
Buena y totalmente recomendable, en resumen.

The Descent, es para mí probablemente, una de las películas de terror que más he disfrutado en muchos años. Segunda película del director Neil Marshall, cuya primera película, Dog Soldiers, me lo hizo pasar en grande.

Mientras en Dog Soldiers teníamos un relato de terror de estilo clásico empapado en gore, mucho humor y mala leche, en The Descent no tenemos ni una gota de comedia, sino que nos muestra una película de supervivencia guiándonos a un terror puro y sin concesiones al espectador, con un guión que por una vez deja los tópicos de lado para centrarse en unos personajes al límite y muy bien construidos.

Uno de los puntos fuertes de la película está en sus protagonistas, todas ellas mujeres, donde sobresalen Shauna Mcdonald y Natalie Jackson Mendoza. Actrices poco o nada conocidas pero que hacen un trabajo buenísimo.

Los interiores de las cavernas son realmente escalofriantes ayudados por la fría fotografía, la música es inquietante para destrozar los nervios en este carrusel sangriento donde el choque y deterioro de las relaciones humanas es más importante que los monstruos caníbales, los cuales tienen un diseño espeluznante y aterrador.

Lo que en un principio parece un relato de aventuras en versión femenina se convierte en una de las experiencias más aterradoras del cine que he visto en los últimos años junto con A' Interieur, Alta tensión y Frontier's, gracias al talento de un director que me resulta muy bueno y con unas ideas de lo más original.

¡ Imprescindible !.

Es difícil hacer algo en el género de terror que consiga ser original y al mismo tiempo cumpla su función de provocar inquietud y tensión.
En esta película, se consigue con creces.
La sensación de claustrofobia y de agobio que supone explorar una cueva, se transmite bastante bien en la primera parte de la película. Este fragmento entraría de lleno en el género de aventuras.
Luego llega la fase terrorífica, y el agobio y la tensión permanecen constantes hasta el final, de manera que el film no deja indiferente. No me parece una del terror del montón de las que se olvidan con facilidad, sino que es más que interesante y digna de volver a verla varias veces.
Las protagonistas no son muy conocidas, pero lo hacen bastante bien. Realmente da la sensación de que lo están pasando muy mal en esta cueva de la que no se puede salir fácilmente.
Otro elemento que está muy conseguido es la iluminación. No sé si se habrán limitado a trabajar con la escasísima iluminación que proporcionan los elementos de supervivencia con los que cuentan estas chicas (bengalas, fuego, linternas y luces), pero desde luego en ningún momento tenemos la sensación de una iluminación falsa tan típica del género (estoy harto de ver bosques con más luz que un campo de fútbol).
Las criaturas están también muy bien hechas y son muy creíbles.
En resumen, una más que buena película de terror en la que se nota que guionista y director se han esforzado en conseguir transmitir tensión y credibilidad, así como la suficiente originalidad en su planteamiento como para que no sea una película cualquiera.
Se merecía haber tenido un mayor éxito para que tuviera un hueco entre las películas más conocidas del género por el gran público.

The descent de Meil Marshall es una cinta de terror y aventuras basada en un grupo de jóvenes espeleólogas que al adentrarse en una cueva, se quedan encerradas dentro donde habitan unos monstruos depredadores. Dirigida con un ritmo más bien reposado aunque más rápido en la acción y con un estilo de terror que se apoya en el sobresalto y en lo desconocido, es una obra que va creando más y más inquietud a medida que avanza la trama, aunque llegado un momento se excede y pierde bastante interés, siendo la parte claustrofóbica la que más inquietud genera. Realizada de modo implacable tiene un resultado asfixiante que atrapa al público aunque no durante todo el film.
La fotografía es oscura la mayor parte del film, con imágenes impactantes y claustrofóbicas al quedarse estas encerradas en una cueva desconocida, dando con ello un toque tenebroso y agobiante. La música es intrigante en su acompañamiento de la acción gracias a unos sonidos insidiosos y eso sí algo ruidosos en las escenas clave, ayudando con ello a aumentar la impresión del público. Los planos y movimientos de cámara completan un magnífico trabajo técnico mediante el uso de detalles, subjetivos, primeros planos, steadycam, travellings, seguimiento, reconocimiento, grúas, aéreos y cámara en mano que sacan lo mejor de cada uno de los sucesos. Destacan también unos efectos sobrecogedores que enardecen la sangre y la violencia.
Las actuaciones son eficientes pero no señaladas y no destaca ninguna por encima de otra. Cuenta con las interpretaciones de Shauna Macdonald, Natalie Jackson Mendoza, Alex Reid, Saskia Mulder, Nora-Jane Noone y MyAnna Buring entre otros. Emplea para estos unos vestuarios sugerentes a cada una de las profesiones de los personajes y unas caracterizaciones estremecedoras en el caso de los misteriosos monstruos que viven en las profundidades.
El guion, escrito por el director, es amenazador desde el primer momento que entran en la cueva, aunque es bastante más efectivo cuando están extraviadas en ella que cuando su mayor preocupación es huir de los extraños seres que viven allí, cumpliendo a medias ya que desde ese momento el film se vuelve innecesariamente gore en la exaltación de las vísceras, la sangre y los fluidos más desagradables que tantas veces han recargado el género. Esto se lleva a cabo con una narrativa común y sugestiva a cada una de los personajes en una expresiva labor que desprende más y más pesimismo a medida que avanza el film.
En conclusión, la considero una obra digna del género que ofrece algo distinto pero que acostumbra al espectador al tipo de terror que emplea, siendo más asfixiante al principio cuando su mayor problema es la desorientación en la cueva que cuando aparecen los extrañas y violentas criaturas. Recomendable por su dirección, fotografía, música, efectos y movimientos de cámara que convierten a The Descent, en un film competente en el género pero no imprescindible para el gran público ni tampoco para los amantes del género.

Potente cinta de terror, en la cual a la sensación de claustrofobia causada por estar encerrado en una cueva sin salida se le suma una raza perdida de hombrecillos con mucha hambre. También se pueden destacar como se definen los distintos personajes femeninos y las relaciones entre ellos. El único punto negro es un final sin mucho sentido.