Killer Barbys

Estamos ante el aburrimiento y el tedio hecho película. Lo primero que uno se pregunta, es cómo el bueno de Santiago Segura aceptó salir en semejante engendro. Me la compré porque prometía, pero me ha decepcionado al 100%. En cuanto empieza la película, con esos títulos de crédito que se te hacen eternos (unos 5 minutos se tiran) ya ves que lo que se avecina no es bueno, pero es que luego ya se pasa de malo. Puedo decir que me dieron ganas de quitarla a los 10 minutos (y eso que luego queda 1 hora y 20 minutos más), pero no sé como, aguanté hasta el final, eso sí, saltándome escenas cada 3 o 4 minutos, porque seguro que si la llego a ver seguida, sin saltarme trozos, habría muerto horrorizado ante tanta mierda. La película es aburrida, pesada e incoherente hasta la desidia (en especial lo primero que he dicho, porque no hay ningún momento de esta basura que entretenga o tenga el mínimo interés). El guión es horrendo, y además a qué viene que el 50% de los diálogos estén en inglés. El desarrollo es con diferencia el más aburrido de la historia del cine (hay pelis aburridas, pero esta se lleva el primer premio). El gore y las muertes muy flojos por no decir de vergüenza ajena, y los cadáveres parecen maniquíes manchados de sangre falsa. La fotografía y la iluminación son tan horriblemente malas que en varias ocasiones no se ve nada (hasta un ciego lo hubiese hecho mejor). La dirección del casposo Jesús Franco de risa (la peli parece dirigida por un grupo de freaks después de una borrachera), y lo que me pregunto es cómo ha podido dirigir este tío más de 100 películas, porque como todas sean de este estilo, la cosa sería para pegarse un tiro con un bazooka (sólo he visto dos pelis más de él y son infames). También otra cosa que me extraña (y mucho) es que la hayan estrenado en cines (parece increíble, pero es que es cierto), seguro que el 70% de la sala se dormiría y el 30% restante iría a la taquilla a reclamar su dinero, porque vamos, pagar y ver esto es peor que un atraco. Seguro que alguno que la vio (y no se suicidara después de hacerlo) llevó puesta una camisa durante un tiempo que ponía: “Yo sobreviví a 1996” (el año en que se estrenó el bodrio este), no es de extrañar que alguno lo hubiese hecho. Pero sigamos comentando cosas de la película: los “actores”, excepto Santiago Segura, todos para matarlos. El diseño de producción, digno de una producción de serie Z. Y el final, uno de los más aberrantes y espantosos que he visto, y no me refiero a imágenes, si no a los créditos finales. Nada más acabar la peli pone “¿Fin?” como si fuese a haber una segunda parte, y eso no es lo peor, sino que la hay. Póntela si padeces insomnio desde hace un tiempo, te plancharás antes de los 30 segundos y sobarás como nunca, palabra. Nota: Basura elevada al cubo.

La ví por el morbo de ver a Silvia Superstar en pelotas y echarme unas risas con el amiguete Segura. Tenía la esperanza de ver algo que aunque malo me hiciera pasar un ratillo entretenido como las pelis de Torrente por ejemplo. En lugar de eso lo que me encontré fue otro bodrio made in Spain que desacredita aún más si cabe al maltrecho cine español. Decir que es muy mala es ser amable.

El problema de esta pelìcula no es que esté hecha con dos pesetas, ni que sea de mal gusto, ni que tenga un argumento más visto que el tebeo, ni que tire de gore barato y sexo chungo para llamar la atención. Con todo eso cuenta uno cuando se pone a ver una película de Jess Franco. El problema de esta película es que es aburrida. Muy aburrida. Todo en ella da una sensación de desgana, de desidia, como si los propios responsables de este engendro la hubiesen hecho no ya sin ilusión, sino sin divertirse siquiera. Sale Silvia Superstar más perdida que un chivo en un garaje. Sale Santiago Segura haciendo una especie de remedo de Evilio, el personaje de sus cortos gore de entonces, pero con menos gracia. Salen los bostezos de la boca del espectador sin solución de continuidad.

Lo cierto es que es una mierda. Y tened en cuenta que soy un admirador de Jess Franco. Y de las Killer Barbies. No os digo más...

Yo suelo ser muy benévolo con las pelis de tito Jess, pero es que esta peli es tan mala y tan cutre que no hay por donde cogerla. Además mete como protagonista al payaso de Santiago Segura, aprovechando el tirón de 'El día de la bestia', cuya actuación resulta más vomitiva que los muñecos que usan como cuerpos defenestrados. Por más de una vez he pensado que iban a aparecer Chiquito de la calzada y Bigote Arrocet, como en una continuación de 'Brácula: Condemor II'.

Hay algunas escenas de sexo y de desnudos, para amenizar la velada, pero que no compensan el resto del bodrio.

A veces digo que una película es totalmente prescindible. En esta ocasión me atrevería a afirmar que debería ser evitada.

Abordar el cine de Jesús Franco con ciento y pico películas en su haber de "dudosa" calidad (por no emplear otro adjetivo) es una auténtica odisea y ejercicio de paciencia extremo.

"Killer Barbys" es un film que cuenta con el grupo vigués con el mismo nombre comandado por Silvia Superstar, Santiago Segura tras "El dia de la bestia" con Álex de la Iglesia y poco más. El argumento es "la vieja confiable" del tito Jess, condesa necesita sangre de sus víctimas para rejuvenecer y con esta premisa se intenta elaborar la enésima película de su filmografía clónica, que si bien funciona en los momentos eróticos (como era de esperar) y alguna que otra muerte, el resultado es una gamberrada bajuna y mala hasta para el año de su salida. Está bien hacer este tipo de cine que también tiene que convivir y de cuando en cuando visionar alguna cinta, pero "Killer Barbys" no ofrece prácticamente nada. Las canciones del grupo sonarán mientras la trama reciclada se mezcla con unos diálogos chapurreando inglés sin venir a cuento. Nula actuación, hasta por parte de Segura que como él lo calificó "estoy trabajando con un mito" pero tampoco sabe muy bien que pinta aquí y ambientación del mercadillo. Podría pasar por la típica película de amigos borrachos, una vez más. Uno se queda como al inicio, pero ya se sabe a lo que nos prestamos voluntarios a ver.

Reservada para los muy fans del director o del propio grupo musical. La frase "para ser de Jess Franco es buena" no aplica aquí.