Ya es un poco difícil ver películas que sorprendan. Mucho peor es que encima gusten. Teniendo en cuenta este criterio, no es de sorprender que acabe viendo películas que no se identifican nada con mis gustos. Cualquier cosa es mejor que dejar que el aburrimiento nos lleve hasta la televisión, con su vulgaridad carente de gusto.
Poco puedo decir que ya no se adivine con el resto de las críticas. Un film para pasar la tarde del domingo.
Todos aquellos que disfruten con los tópicos de las películas de terror, encontrarán en esta cinta, una hora y media de cine sin pretensiones. En definitiva, es lo que todos esperamos cuando buscamos entretenimiento. Para todos aquellos que buscamos un mensaje más profundo en las cosas, ya tenemos la literatura. Y últimamente, ni eso.