La original era realmente oscura y aterradora que secuela tras secuela terminó convirtiéndose en caricatura del personaje. Pero realmente aquel Muñeco Diabolico que te prohibían ver tus padres pero que observabas de reojo aunque te taparas la cara frente al televisor, sumergía a los niños de mi generación  en un mar de pesadillas nocturnas que podían durar años.

Esta por momentos consigue aproximarse al clima de la original y para cuando le solicitas que es el momento de enseñar sus cartas, se viene abajo. Esta llena de ideas frescas, sangre, víctimas etc...y adaptadas a los tiempos de hoy pero a mitad de película hacia el final se derrumba, termina cayendo en los tópicos que hacen este producto unicamente adaptado para los milenials.
Falla estrepitosamente en el clímax final, una especie de Rebelion de las Máquinas con chiquillos. Una película decente si no fuera porque es un remail, y aquí las comparaciones son odiosas porque no veo a estos milenials de ahora mojando la cama con este nuevo Chucky.
Siento que ha sido un suspenso alto, alto, altísimo pero ahí te quedas macho. No capta para fans del muñeco.