Un año después de hacernos sufrir con los tripulantes de la Deepwater Horizon en Marea negra, protagonizada por Mark Wahlberg, Kurt Russell, Kate Hudson, John Malkovich y Dylan O'Brien, entre otros, y basada en un hecho real, Peter Berg vuelve a la carga con otro hecho real. Esta vez en tierra firme. Los hechos acaecidos durante la maratón de Boston en abril de 2013. Un duro atentado recordado por muchos y en el que murió mucha gente.
Wahlberg, tras la buena acogida con Berg tanto en El único superviviente (2013) como con su mencionado anterior film, repite por tercera vez con esta Día de Patriotas y se vuelve a meter como cabeza de reparto. De todos modos, no es el único importante en esta cinta explosiva, nunca mejor dicho. Junto a él vemos rostros conocidos como los de John Goodman, Kevin Bacon, J.K. Simmons, Michelle Monaghan y Melissa Benoist entre otros, todos ellos interpretando a personas reales que fueron parte importante en los terribles acontecimientos que nos muestra dicho film. Peter Berg sabe cómo rodar, no será un Spielberg, un Nolan, un Zemeckis, pero el hombre sabe defenderse muy bien detrás de la cámara. Bien es cierto que en un film basado en hechos reales, los responsables del guión, en el que Berg es parte vital, se toman ciertas licencias a la hora de contar la historia. La manera de presentarnos a los personajes y su función en la trama, el gran momento de la maratón y los problemas que se generan a posteriori, todo rodado con un gran pulso y con su toque dramático correspondiente. Ya nos lo dejó claro en la de Marea Negra, junto a un gran reparto y a unos magníficos efectos visuales y sonoros que fueron nominados a los Oscar, a los premios de la Academia. Aquí los efectos sonoros son alucinantes, y el sonido es espectacular.
Un film muy realista, no porque esté basado en un hecho real, que también, sino porque te haces partícipe de él, te metes en la historia y lo vives como una persona más, como un protagonista más. Hay ciertas secuencias que, te las ves venir, pero aún así lo sufres. Tiene un muy buen montaje, esto de mezclar imágenes reales de archivo de aquellos desgarradores momentos con aspectos ficticios me ha parecido muy acertado. Al igual que el emotivo tramo final, o mejor dicho, esos minutos finales que consiguen tocarte la fibra sensible e incluso sacarte una lagrimita. Me ha gustado ver a la actriz Melissa Benoist fuera del personaje de Kara Danvers alias Supergirl de la homónima serie de The CW, para meterse en la piel de un personaje completamente antagónico. Y de lo más creíble. La partitura compuesta por Trent Reznor y Atticus Ross (La Red Social de 2010 o el remake USA de Millennium: Los hombres que no amaban a las mujeres de 2011) conecta muy bien con cada escena de la película.
Después de esta nueva y maravillosa experiencia visual, a ver qué es lo que nos tiene preparado el señor Berg. Estaremos a la espera. Mientras, os dejo mi nota final, del film que nos ocupa, que es de 9/10.