A los que nos encanta Stanley Tucci no podemos dejar de ver esta serie y seguir fascinándonos con él. Y aunque hay que hacer el esfuerzo de abstraerse de los muchos puntos en común que tiene con House (todo lo que tiene de gran profesional lo tiene de insoportable, algunas operaciones son iguales, el abuso del recurso de la hipervisibilidad…); merece la pena ver 3lbs, aunque sólo sea por la banda sonora y las secuencias con ralentí finales a lo CSI. La verdad es que es una pena que se cancelara por baja audiencia en su octavo episodio.

En fin, sólo te diré: olvídate de las otras series de médicos que has visto, aquí no hay estrés en los pasillos de “Urgencias”, ni líos amorosos... en este hospital hay otro tempo, todo va más lento: las imágenes, los sonidos y los personajes se disfrutan. Y sí, aunque sea un hospital y sea Nueva York, aquí se respira tranquilidad. Bienvenido sea Hanson, su serena arrogancia y sus tres libras.