Austin Powers: El espía seductor

La gente que critica esta película...¿que cojones esperaba ver?
Es una obra para reírte con situaciones y personajes absurdos con la base del doblaje del gran "Flo".
No tiene un momento de descanso, es un no parar de momentos desternillantes donde los personajes de Myers (Austin, Doc Maligno y Gordo Cabrón) consiguen que no pares de reír.
Es cierto que la primera entrega es muy floja y la tercera solo merece la pena por ver a Beyonce, pero esta segunda parte merece verla para pasar un buen rato y no hace falta ver las otras dos.

Si uno quiere ser crítico de cine y le da un palo a esta película, que es un objetivo fácil, adelante. Pero para desahogar la frustración entre otras cosas se recomienda la risa que puede proporcionarte este espía de dentadura inglesa.


-Marría Unpajote: Hay que tener mucho intelecto para jugar al ajedrez, señor Powers, supongo que usted sabrá jugar.
-Austin: Llámame Romario nena

A esta película le tenía puesto un 9 de nota, porque recuerdo que me descojoné vivo en el cine cuando la vi, hace 20 años. Anoche la vi y me pareció terrible. No me hacía reír. La forma de contar la historia me parecía aparatosa. Muchos chistes tontos e innecesarios, y como tema principal el sexo. En una palabra: INFUMABLE.

Quiero pensar que el problema es que en estos 20 años he madurado y esta película ya no es para mí, pero temo que el problema realmente sea que me he hecho viejo.

Esta película no engaña, sino que ofrece lo que promete: risas fáciles, tías buenas, un "torrente" a la inglesa, tetas, culos, pedos, pises y demás escatologías. Se puede pasar un rato entretenido viéndola si te la tomas como lo que es y no esperas chistes intelectuales donde no los vas a encontrar. Mención aparte merece el doblaje de Florentino Fernández, que le da a la versión en español una personalidad muy auténtica.

Humor de tetas y culos con la voz exagerada del señor Fernández, ocupado del doblaje justo cuando estaba en pleno apogeo de éxito televisivo.

La primera parte, que pasó por este lado del Atlántico con algo más de pena que de gloria quedó sepultada bajo esta. Esta, con su doblaje tenía algo que no tenía la otra, y era el carisma de Fernández, pero esta segunda, adolecía de algo que rebosaba en la primera: gracia. Cosa fundamental en una comedia. Que vale que con esta también me reí, pero supongo que todo me resultaba exponencialmente más exagerado, y esto fue su perdición.

Me da la impresión de que la traducción en esta es mucho más libre, lo que hace que Myers y su personaje, el señor Powers pierdan parte de su sustancia humorística propia. Se ha cambiado ese humor chabacano de Hollywood por el humor chabacano más castizo. Ojo, que uno no es peor que el otro, pero meter a uno dentro del otro no da buen resultado.

Que bueno, que no está tan mal. Simplemente digo que se queda lejos de la primera, que es realmente una gran película para disfrutar. Esta es una imitación exagerada hasta el límite. Si hubiesen seguido los dobladores de la primera, probablemente La espía que me achuchó ganaría mucho.

Hacía tiempo que no me reía tanto como con esta cinta. Es un no parar, con un Mike Myers en su mejor papel y unas situaciones que harán que te tronches de la risa. Es una genial parodia de James Bond en la que hasta en los detalles menos importantes hay que fijarse ya que incluso con ellos te reirás. La recomiendo a cualquier persona que quiera reirse sin parar durante más de una hora. Es simplemente tronchante.