Moana: Un mar de aventuras

Es una película musical de aventuras y fantasías protagonizadas por la adolescente Vaiana, a quien vemos crecer feliz en una isla de la Polinesia, predestinada a liderar a su pueblo y elegida por el océano para cumplir una profecía, que restaurará a la Madre Naturaleza el corazón robado una vez por un semidiós llamado Maui. Y en donde se muestra a una chica decidida, enérgica y capaz de valerse por sí misma, contra toda adversidad; muy lejos de los roles de las antiguas princesas Disney y más parecido con la últimas protagonistas de las últimas animaciones como Enredados, Brave o Frozen.
El nombre de Vaiana, ha sido rectificado de la original “Moana”, porque dicho nombre es una marca registrada de perfumería en Europa, y buscaron un parecido que encajase también en su significado, ya que Moana, en maorí, significa “gran extensión de agua, océano” y Vaiana, es una palabra que en Tahití se traduce como “agua procedente de la cueva”, por lo que se podía atribuir perfectamente en el contexto de la historia.
La animación está completamente hecha por técnicas digitales, salvo los tatuajes de Maui, que han sido creados manualmente y adquieren vida de forma ocasional. Los paisajes, la isla, las montañas, el mar, están llenos de color, naturaleza y efectos especiales que la hacen muy grata de visualizar y llenarnos de imágenes bonitas. A destacar la escena de “los Kakamora”, claramente identificados con la estética de Mad Max o Waterworld, y una de las más divertidas de la película.
En el doblaje español, las canciones de la adolescente Vaiana, han corrido a cargo de la que fue ganadora de la Voz Kids 2014: María Parrado, igual que lo hizo en Annie (2015), de las que destaca la canción “Que hay más allá” (How far I’ll go), tema principal de esta película compuesto por Lin-Manuel Miranda, protagonista absoluto del musical con 11 Premios Tony de Broadway: Hamilton.
Los directores de Vaiana, también lo fueron de otras películas clásicas de Disney como: Aladdin, Tiana y el Sapo o La Sirenita, aunque no guarda ningún parecido con esta última, incluso teniendo un vínculo marino. Lo que sí han conseguido es una buena historia, con unos personajes que transmiten mucho y además cuenta con buenas canciones, por lo que será un nuevo clásico de Disney en muy poco tiempo.

Correcta película que no solo reproduce marcas propias de la casa (de Disney) sino que cae en parte en errores vistos ya antes en otras películas Disney (con el agravante de no intentar corregir nada de eso... aunque a lo mejor es que no hay ningún intento en corregir nada).

Las películas Disney han encontrado hoy una fórmula de éxito donde se fabrican productos diseñados hasta el último detalle pero que pierden ciertan magia y espontaneidad (pero eso se aplica no solo a su cine de animación, también a Marvel y su cine de superhéroes). Honestamente, echo en falta cierta animación tradicional: tanto ordenador me deja frío. Visualmente será espectacular, pero así se disimula si desmerecen otros aspectos artísticos.
Por ejemplo, la música de Mark Mancina es fría. No aporta nada. En condiciones normales las canciones las haría el compositor del resto de la música pero aquí eso no pasa y las canciones no se integran correctamente en el resto de la banda sonora (ni de la película) y son más bien canciones poperas metidas en la película casi con calzador. Musicalmente hablando ya ha pasado al olvido los tiempos de Aladdin o La Sirenita. Y ojo, tanto la canción del cangrejo como la de Maui tienen muchas posibilidades, pero les acaba faltando punch (son los mejores intentos de la película).
Las canciones asociadas a Viana son las peor integradas (y las peores a nivel musical). Pero no pasa nada, como en Frozen donde no llega la calidad llega el marketing.

¿Dónde lleva un cine diseñado de esta manera? La película se hace con un target en mente, un objetivo. Se busca un público para la película y no se buscan complicaciones. No hay que arriesgar, en absoluto. Se busca un público no solo infantil sino púber que puede verse reflejado en Viana: chica guapa que quiere ser "libre" e ir más allá de lo que sus padres quieren que vaya; finalmente se rebela y sus padres aceptan totalmente aquello que ella ha hecho porque ella sin duda ha hecho lo correcto (son los padres los que se han equivocado). Hemos pasado de la moralina de Disney a dar a cierto público un espejo donde puedan verse gratamente reflejados.

Eso sí, eso no desmerece lo que vemos en la película. La puesta en escena es correcta como el conjunto de la película. Pero no es brillante (lo que no significa que no vaya a gustar a un público muy amplio) y es una pena.

Todo demuestra que no es complicado hacer una buena película, lo que es complicado es hacer una película brillante y es lo que no es. Pero lo malo no es que no lo sea, lo malo es que ni tan solo intenten hacer una gran película.

Por cierto, ya que he dicho que echo de menos cierta animación tradicional: la animación por ordenador nos regala momentos espectaculares, pero los más vistosos son el número de Maui "de nada" donde hay elementos de animación tradicional y sobretodo la aparición de la tortuga donde a la animación digital se suma la animación tradicional.

Indicada para... ¿en serio esperáis que responda? Para los más pequeños y para fans de Disney de cualquier edad.

Anotación final: el gallo aporta un acertado punto de humor, pero le falta más humor y Maui en algunos aspectos llega a recordar a el genio genial (pero le falta, valga la redundancia) su magia.

Antes de nada comentar que previo a la película podremos disfrutar de un cortometraje llamado Inner Workings, donde se nos explica la lucha entre la razón y el corazón, la batalla por no ser otro más, por disfrutar de la vida y vivir el momento como si no hubiera otro. Simpática y con gran sentido del humor, es un corto genial que recuerda a Del revés y supone una gran introducción para lo que nos espera después. Leo Matsuda nos invita a disfrutar de las pequeñas cosas de la vida y a no seguir al rebaño social en el que nos estamos convirtiendo. Una pequeña joyita que seguro os gustará.

De VAIANA debemos saber que Te Fiti era la isla a la que Maui, el semidiós, le arrebató su corazón, un corazón que creaba vida, pero con eso despertó a Te Ka, el monstruo que destruye la vida y, por lo tanto, pone en peligro a ese precioso lugar en el que Vaiana y su pueblo viven. Ella es la hija del jefe, futura jefa que siente un interés enorme por lo que hay más allá del arrecife. Desea navegar y no sabe por qué, y las historias que le cuenta su abuela hacen que todavía se despierte más en ella esa pasión, pero su padre se interpondrá una y otra vez para dirigirla hacia su deber. En el inicio de la película podremos ver a una adorable Vaiana y su crecimiento, hasta el momento en el que las cosas comienzan a torcerse en la isla.

Todo alimento, isla incluida, comienza a pudrirse, señal inequívoca de que hay que devolver el corazón a Te Fiti, viaje que emprenderá Vaiana al conocer que hace muchas generaciones, eran una tribu de navegantes. Pero antes de devolver la gema ha de encontrar a Maui, el semidiós ladrón que sabe dónde está dicha piedra. Dicho y hecho, la joven hará que la acompañemos en un viaje maravilloso, visualmente preciosista pero con una trama llena de buenos momentos, pero también muchos que son totalmente prescindibles. Maui, el semidiós que tanta polémica generó con su físico estereotipado. Más allá de eso, es un personaje que podría haber dado más de sí, como algunos más. Solo diré que el divertido pollo compañeros de Vaiana ya tiene más carisma que el semidiós.

John Musker y Don Clements (La sirenita o Hércules) dirigen una aventura que ya hemos visto. El típico road trip en el que el protagonista ha de salvar el mundo. Esta vez es una princesa, una guerrera o como queráis llamarla, alejada del arquetípico convencional y con sus curvas y carisma. Disney se está tomando en serio la evolución de las princesas, aunque con los tiempos que corren no deberíamos ni hablar de ello. En todo caso, VAIANA es una película un tanto irregular, ténicamente impecable: el mar, las islas, el modelado de personajes, etc., pero dos horas de filme que se hacen largas y donde algunos personajes y hechos que se narran son muy prescindibles, como el cangrejo, que caerá en el olvido sin remisión.

Musicalmente tiene un par de temas interesantes, como "Shiny" o "You're welcome", pero las demás no rayan al nivel al que Disney nos tiene acostumbrados. Aún así, VAIANA se hace disfrutable en todos los sentidos y transmite un mensaje medioambiental que vendrá muy bien a los más pequeños, aunque quizás todavía más a los mayores. Lógicamente, la película ha sido nominada a los Globos de Oro y será candidata a los Oscar sí o sí, pero creo que Kubo y las dos cuerdas mágicas está por encima, una película mucho más profunda y con personajes más carismáticos. Veremos qué sucede.

En definitiva, VAIANA supone un avance para Disney, una película visualmente atractiva en la que nos perderemos en los mares oceánicos y disfrutaremos de un viaje que ya nos suena, con algunos personajes carismáticos y buenas intenciones. Los más pequeños se lo pasarán muy bien, aunque quizás se les haga algo larga. En todo caso, es una de las mejores películas de animación del año, por lo que no deberíais perdérosla.

Mientras veia la pelicula, cada vez me preguntaba mas: ¿Cuando termina?
Pelicula tipica, guion tipico, personajes tipicos, lo unico bueno, y fue por eso que la mire, fue su animacion, tiene un exelente y notable trabajo de animacion, pero en lo demas falla.
Las escenas son super predecibles, los personajes no sobresale ninguno, son aburridos y tipicos, la verdad una desepcion.

Con ‘Vaiana’ tenemos una nueva aventura cuyo principal argumento es el ya típico “viaje de descubrimiento”. Un viaje por mar en el que una chiquilla y un semidios llegarán a conocerse, respetarse y valorarse mutuamente. La chiquilla naturalmente es Vaiana y el semidios es Maui. Las virtudes y defectos de ambos saldrán a la luz (especialmente los de Maui) y nosotros iremos contemplando su relación hasta el espectacular clímax final.

Al margen del “viaje de descubrimiento”, Disney también nos habla aquí de la familia (por supuesto), de la confianza en uno mismo y en el ajeno, del respeto y conocimiento de las tradiciones y/o leyendas, y de otros argumentos y/o ideas ya muy explotadas a nivel comercial… como es el hecho de buscar tu destino y tu lugar en el mundo. En este sentido, esta frase que la abuela Tala le dice a Vaiana resume muy bien la película: “¿Quién se supone que debes ser?”.

En los párrafos anteriores me he referido a Vaiana y Maui. Respecto a ellos cabe decir que son dos personajes muy interesantes. Vaiana porque no es la típica “princesa Disney”, ella es capaz de resolver todo por sí misma y no busca amor sino aventura. Maui es una leyenda andante y lo más atrayente de él es ir viéndolo salir del olvido y conocer la verdad de las leyendas y hazañas que él mismo cuenta: ¿Serán ciertas o será un farsante?… A destacar que ambos están genialmente interpretados en la VO por Auli’i Cravalho y Dwayne Johnson, de hecho, Maui hereda algún que otro gesto del antiguo campeón de la WWE.

En definitiva: 'Vaiana' es una película cuyo mensaje hemos visto y escuchado cientos de veces pero que brilla gracias a una factura animada/técnica impecable y fabulosa, y también gracias a unos personajes como Vaiana y Maui que llenan la pantalla con su carismática presencia, cada cual a su manera.

-Lo mejor: Los personajes de Vaiana y Maui y sus correspondientes doblajes a cargo de Dwayne Johnson y Auli'i Cravalho. El espectacular trabajo realizado con Te-Ka, el monstruo de Lava. La pegadiza canción “You´re Welcome”.

-Lo peor: Por mucho que venga revestido de exotismo, el guión no deja de recoger temas ya muchas veces repetidos. Quizás (y pese a no dejar de ser un musical) haya demasiadas canciones.

-Más en: www.cineycine.com