Haz click aquí para copiar la URL

El planeta salvaje

7.4
5,777
Animación. Ciencia ficción. Drama En el lejano planeta Ygam viven unas criaturas gigantescas llamadas “Draags” que han domesticado a los pequeños "Oms", seres humanos que están siendo exterminados. Pero un Om consigue escapar... (FILMAFFINITY)
<< 1 2 3 4 5 9 >>
Críticas 43
Críticas ordenadas por utilidad
26 de abril de 2012
12 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
Del director francés René Laloux, os propongo esta rareza, dentro del cine de animación para adultos.

Nos narra la historia de unos seres gigantes llamados Draags que usan a los humanos, llamados Oms, como mascotas, con el fin de exterminar a la raza humana. Una de las mascotas humanas de los Draags, consigue escapar y busca a otros humanos para luchar contra los Draags. Así empieza esta curiosa película de animación. Nos presenta una idea original y con mucha imaginación. Tiene un dibujo un tanto peculiar, (del gran dibujante Roland Topor) al igual que su "rara" banda sonora, diferente y poco visto dentro del mundo de la animación. La película es bastante avanzada a su tiempo, pues es de 1973, pero parece que el paso del tiempo no la deteriora. Eso sí, una vez más nos encontramos ante un cine minoritario y no para todos los gustos.

Una explosión de creatividad que nos hace reflexionar y pensar sobre la vida. La recomiendo a todas aquellas personas que deseen experimentar nuevas sensaciones. Espero que no les decepcione. Disfruten del buen cine.
Lostbreak
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
15 de abril de 2014
7 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
En los años setenta, mientras en esta España nuestra el franquismo daba sus últimos coletazos, en la vecina Francia nacía una de las obras más reconocidas – y a la vez desconocidas- del cine de animación Europeo. Estamos hablando de “El planeta salvaje” (René Laloux, 1973), un largometraje de ciencia ficción que nos conduce al extraño Ygam, un planeta habitado por unos gigantescos seres azules (Draags) que tienen a los seres humanos como mascotas. Sin embargo, la alta capacidad reproductiva de las personas y el constante aumento de su número, se convertirá pronto en una amenaza para el ecosistema de los draags, que deberán adoptar medidas extremas para acabar con la plaga.

Inspirada en la novela “Oms en Série” (Stefan Wul, 1957), “El planeta salvaje” fue el primer largometraje animado que Laloux realizó en colaboración con el escritor y dibujante francés Roland Topor, quien – con anterioridad- ya había participado en la creación de varios cortometrajes como “Les temps morts” (René Laloux, 1964) o “Les escargots” (René Laloux, 1965), obra esta última que recoge todos los elementos que ocho años después se volverían a utilizar en el “El planeta salvaje”. La figura de este reconocido artista surrealista, resulta imprescindible para entender – o no- el carácter confuso e irreal que da forma a esta obra.

No nos quedamos cortos al afirmar que “El planeta salvaje” es una de las películas más raras que nos podemos encontrar. Nos encontramos ante un mundo atípico donde realidad e ilusión se entremezclan y en donde la divisoria entre sueño y pesadilla se diluye no pocas veces, dando lugar a dalinianos escenarios poblados de extravagantes monstruos y formas tan bellas como siniestras. Como en “Les escargots”, Topor da rienda suelta a su imaginario surrealista, quedando la estética y la trama de la película fuertemente marcadas por este peculiar sello artístico.

De todas maneras, a pesar de la extrañeza que el espectador pueda sentir ante el constante desfile de seres y enseres irreales, hay que señalar que “El planeta salvaje” cuenta con una la trama bastante fácil de seguir y de la que se pueden sacar diferentes lecturas. La más clara es aquella que invita a reflexionar sobre el comportamiento que el ser humano tiene respecto al mundo que le rodea y las posibles consecuencias que se pueden derivar de ello. Los draags no son sino un reflejo del hombre actual, dueño y señor de su planeta y eslabón superior de una comunidad animal cuyos miembros se encuentran sometidos a su voluntad y a sus necesidades. El draag es capaz de amar y respetar al resto de especies pero – a su vez- puede mostrarse cruel, ya sea por el placer de ejercer la dominación (algo visible en la escena inicial donde unos jóvenes draags acosan a una diminuta mujer con su retoño) o por simple diversión (peleas de humanos).

El tamaño de los seres humanos en el planeta de Ygam apenas supera el de un insecto en la Tierra, siendo – de esta manera- una presa fácil para todo tipo de depredadores. De aquí surge el segundo punto de vista que ofrece “El planeta salvaje”, en donde nuestra especie se encuentra en un punto de inferioridad frente a una raza superior. En esta situación, es el miedo el que determina el comportamiento de un hombre que se constantemente perseguido y acorralado. Pero a su vez, el ser humano cuenta con su gran capacidad innata de adaptación, de tal manera que, a pesar de la hostilidad del entorno, será capaz de aprender y de superar todos los obstáculos, llegando incluso a dominarlos en su beneficio.

Llegados a esta situación, el choque entre las dos razas – amenazadas mutuamente- es inevitable. Ambas buscarán exterminarse en una lucha por la supervivencia, mas esta no será la solución. “El planeta salvaje”, en una última lección, aboga por la necesidad de encontrar un equilibrio (un entendimiento) entre draags y humanos, ya que en caso contrario ambas se verán abocadas a la extinción. Toda una moraleja que, en el momento de estreno de la película, bien podía hacerse extensible a una sociedad marcada por una Guerra Fría en la que se enfrentaban dos grandes bloques antagónicos (Capitalismo-Comunismo).

En su momento, el Festival de Cannes galardonó “El planeta salvaje” con el Premio especial del Jurado, un reconocimiento bien merecido – e incluso necesario- para una obra tan atípica como fascinante. Es evidente que muchos huirán de ella como de la peste, pero el resto encontrará un trabajo cargado de virtudes y sorpresas, que no porque no se entiendan, deben dejar de sorprender.

Léeme o contáctame en:
http://unescritounico.blogspot.com/
https://twitter.com/hthorPintado
hthorpintado
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
9 de mayo de 2009
8 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
Un pequeño Om, en manos de un gran Draag, hay un ser dominante en la escena. Uno ama a la indefensa criatura, el otro, ser curioso, atiende a sus movimientos, para ser libre hay que saber respetar la libertad de todas las criaturas, incluso de los depredadores, porque a una victoria siempre le preceden grandes derrotas, y a la vez es la visión previa a una vida propia.

El pequeño Om utiliza su curiosidad como aprendizaje, no todos le amarán con ojos de niño, la inteligencia es el arma más temerosa cuando existe uno poderoso y centenares débiles pero con ganas de existir.

Los grandes escapan de su forma, para la vida hay muchos modos de alimentarse. La mezquindad del siempre ganador es una ventaja traicionera. Y quien lo tiene todo perdido no le importa tropezar para conseguir algo mejor.

Llega el momento de equilibrar conocimientos, una oportunidad única, la igualdad que mida al ser grande con el pequeño será el momento definitivo, donde surgirá la duda de la existencia de la tolerancia.

En un planeta donde todo se moldea segun se avance, las formas imposibles respiran. Nos acompañan al descubrimiento, a un nuevo despertar, la tierra respira, y sólo nos muestra que la danza del cortejo es para todos el punto débil de la especie, y el miedo es el arma del día y el misterio de la noche. Todos iguales en cualquier dimensión o realidad. Todos distintos del ser que permanece a un lado. Todos verdugos y victimas o todos en paz. Todos con el equipaje preparado para viajar al planeta salvaje.
mnemea
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
12 de marzo de 2009
7 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
Dejando a un lado todo ese mensaje sobre la tolerancia y los paralelismos subyacentes entre esta peliculita de culto y la ocupación soviética, a mí me ha gustado sobre todo por el universo tan imaginativo que tiene y por su estética, que recuerda mucho a las ilustraciones de Moebius.

Lo único malo es la animación, que es algo tosca en algunos momentos pero se le perdona por tener ese encanto especial de los dibujos antiguos.
Charlon
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
15 de septiembre de 2008
9 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hace muchos años que la ví y ahora estoy intentando encontrarla en algún lugar especializado en cine, pero de momento no he tenido suerte. Para mí ha sido una de las películas que me han dejado huella. Después de los años la sigo recordando como innovadora e impactante. Sus imágenes te hacen pensar que somos producto de la casualidad y que ¿por qué no?, podríamos haber sido animales en lugar de hombres y haber sido objeto del maltrato, manipulación, agresiones y, además, conformes con nuestra condición de relegados por no tener capacidad para comprobar que existen otras opciones. Hace años no tenía la perspectiva de la vida de hoy, ahora soy padre compruebo la importancia de la educación, el ambiente, entorno social y físico, motivación, intenciones, etc., en el desarrollo de la personalidad, y esta película describe perfectamente estos factores. Desde luego que la situación política de entonces también estaba muy bien reflejada, aunque se puede extrapolar a los tiempos actuales. Muy recomendable.

Saludos. a tod@s l@s amantes del cine
MANUEL
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 2 3 4 5 9 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow