US 
Canadá 
México 
España 
UK 
Irlanda 
Australia 
Argentina 
Chile 
Colombia 
Uruguay 
Paraguay 
Perú 
Ecuador 
Venezuela 
Costa Rica 
Honduras 
Guatemala 
Bolivia 
Rep. Dominicana Los enredos de Harry
36,389
Comedia
Harry Block, un escritor de mediana edad y con un cierto éxito, se ha servido con frecuencia de sus experiencias sentimentales y familiares para escribir sus obras, razón por la cual la mayor parte de sus amigos, parientes y ex-mujeres lo odian. En tales circunstancias, le resulta muy difícil encontrar a alguien que quiera acompañarlo en un viaje a su vieja universidad para recibir un homenaje. (FILMAFFINITY)
20 de febrero de 2009
151 de 168 usuarios han encontrado esta crítica útil
Lista de perlas que van a encontrar en 96 minutos (no desvela nada de la trama)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
25 de junio de 2006
122 de 135 usuarios han encontrado esta crítica útil
Una de las más ácidas, sarcásticas e hilarantes comedias del genio Neoyorkino. Todo un alarde de construcción narrativa, y perfil de caracteres.
Harry Block, seguramente un alter ego del artista judío, firma esta cinta memorable para mayor gloria aún de su prolífica y dilatada filmografía, llena de diálogos sugestivos, inteligentemente sarcásticos, con su punto justo de gruesa mordacidad y su dosis respectiva de sutil ironía Alleniana.
Un artista literato, cobarde, enormemente ególatra, inmaduro, psicótico, kafkianamente pesimista y deprimente, mujeriego y putero, no misógino sino hirientemente indiferente con el sexo opuesto,y demasiado neurótico para vivir en un mundo real, que necesita por ello refugiarse en sus relatos de ficción autobiógrafica...
Con cada una de sus obras no sólamente va desnudando o más precisamente deconstruyendo este genial personaje, sino que al mismo tiempo va adentrándose sin permiso, prorrumpiendo de manera harto agresiva en la vida personal de los personajes que han formado y forman parte de su dislocante y alocada vida.
A través de una ingeniosa técnica narrativa, mezcla de realidad distorsionada y subjetiva del propio artistay de ficción altamente ofensiva y deconstructiva, asistimos con placer y deleite a una serie de divertidas y disparatadas situaciones durante la escasa hora y media de metraje, que termina finalmente por dejarnos el regusto de las grandes obras, las de un artista que como Wilder, siempre procuró enfatizar a la vez que relativizar la importancia de la vida.
Harry Block divide compulsivamente el mundo en dos tipos de personas; las que optan por una existencia apegada a los valores ortodoxos de cualquier religión (en concreto critica de forma persistente y mordaz la inflexibilidad del lado radical del sionismo, los denominados halcones), que dicta las leyes de lo políticamente correcto, basadas en gran parte en una serie de supersticiosas creencias separatistas (y crean el concepto de "los otros", con el objetivo de focalizar el odio incontenido de las frustaciones personales de cada uno), y por otra parte estaría el grupo de aquellas otras personas que optan por el lado de la ciencia.
Y aunque Harry milite en este última postura, el artista también demoniza ciertos aspectos de la misma, como es la pérdida de valores, y el anodino nihilismo que termina por deprimir aún más al ser humano.
I M P R E S C I N D I B L E.
Harry Block, seguramente un alter ego del artista judío, firma esta cinta memorable para mayor gloria aún de su prolífica y dilatada filmografía, llena de diálogos sugestivos, inteligentemente sarcásticos, con su punto justo de gruesa mordacidad y su dosis respectiva de sutil ironía Alleniana.
Un artista literato, cobarde, enormemente ególatra, inmaduro, psicótico, kafkianamente pesimista y deprimente, mujeriego y putero, no misógino sino hirientemente indiferente con el sexo opuesto,y demasiado neurótico para vivir en un mundo real, que necesita por ello refugiarse en sus relatos de ficción autobiógrafica...
Con cada una de sus obras no sólamente va desnudando o más precisamente deconstruyendo este genial personaje, sino que al mismo tiempo va adentrándose sin permiso, prorrumpiendo de manera harto agresiva en la vida personal de los personajes que han formado y forman parte de su dislocante y alocada vida.
A través de una ingeniosa técnica narrativa, mezcla de realidad distorsionada y subjetiva del propio artistay de ficción altamente ofensiva y deconstructiva, asistimos con placer y deleite a una serie de divertidas y disparatadas situaciones durante la escasa hora y media de metraje, que termina finalmente por dejarnos el regusto de las grandes obras, las de un artista que como Wilder, siempre procuró enfatizar a la vez que relativizar la importancia de la vida.
Harry Block divide compulsivamente el mundo en dos tipos de personas; las que optan por una existencia apegada a los valores ortodoxos de cualquier religión (en concreto critica de forma persistente y mordaz la inflexibilidad del lado radical del sionismo, los denominados halcones), que dicta las leyes de lo políticamente correcto, basadas en gran parte en una serie de supersticiosas creencias separatistas (y crean el concepto de "los otros", con el objetivo de focalizar el odio incontenido de las frustaciones personales de cada uno), y por otra parte estaría el grupo de aquellas otras personas que optan por el lado de la ciencia.
Y aunque Harry milite en este última postura, el artista también demoniza ciertos aspectos de la misma, como es la pérdida de valores, y el anodino nihilismo que termina por deprimir aún más al ser humano.
I M P R E S C I N D I B L E.
Madame Web
21 de julio de 2007
56 de 70 usuarios han encontrado esta crítica útil
Este es mi primer Excelente que dedico a Allen al que, por regla general puntúo con elevadas calificaciones.
¿En que me baso para otorgar esta puntuación en esta película y valorarla por tanto, por encima del resto?
Creo necesario visionar o revisionar la última etapa de Allen y si puede ser en un tiempo razonablemente pequeño mejor, eso ayuda a una visión cronológica y en perspectiva de su obra.
"Desmontando a Harry" es la película más compleja de Allen, en el fondo y en la forma, cualquier otra película de esta etapa es un divertimento comparada con esta sinfonía. Compleja en la cantidad de intersecciones de los personajes que además combinan realidad y ficción mezclándose (es un instrumnto muy "Allen"), en las dosis justas y razonables sin caer en lo gratuíto.
Realiza, una vez más, un pequeño homenaje cinematográfico, en este caso a las "Fresas Salvajes" de Bergman, y una vez más de manera corrosiva manteniendo la distancia entre el respeto por el clásico y la libertad para barrenar unos personajes esenciales de la historia del cine, la "road movie" de la parte final es sensacional.
"Desmontando" en principio es una película coral con unos personajes secundarios perfectamente dibujados e integrados en la historia, TODOS, tanto los interpretados por actores no muy conocidos (pero desde luego solventísimos) como los interpretados por grandes estrellas, de tal manera que ningún personaje se inserta con calzador creando recodos en la historia, ni los espacios físicos condicionan tampoco la misma.
Curiosamente, pese a ese aparente carácter coral, se oculta la historia más introspectiva y la reflexión más interior que hace Allen, reflexión sobre la creación, la vida/muerte, realidad/ficción desde un punto de vista que ya conocemos pero que ahora alcanza su mayor grado de perfección en la puesta en escena. Una puesta en escena que, como gotas precisas dosifica magníficos chistes absurdos allenianos, algunas concesiones "teatrísticas" (representación del infierno), y mantiene un hilo argumental que pese a su complejidad camina extraordinariamente bien, añadiendo igualmente excelentes pinceladas musicales y algunos gangs maravillosos (el del personaje desenfocado es impagable).
Así pues sólido andamio y excelentes operarios para hacer una película fundamental.
¿En que me baso para otorgar esta puntuación en esta película y valorarla por tanto, por encima del resto?
Creo necesario visionar o revisionar la última etapa de Allen y si puede ser en un tiempo razonablemente pequeño mejor, eso ayuda a una visión cronológica y en perspectiva de su obra.
"Desmontando a Harry" es la película más compleja de Allen, en el fondo y en la forma, cualquier otra película de esta etapa es un divertimento comparada con esta sinfonía. Compleja en la cantidad de intersecciones de los personajes que además combinan realidad y ficción mezclándose (es un instrumnto muy "Allen"), en las dosis justas y razonables sin caer en lo gratuíto.
Realiza, una vez más, un pequeño homenaje cinematográfico, en este caso a las "Fresas Salvajes" de Bergman, y una vez más de manera corrosiva manteniendo la distancia entre el respeto por el clásico y la libertad para barrenar unos personajes esenciales de la historia del cine, la "road movie" de la parte final es sensacional.
"Desmontando" en principio es una película coral con unos personajes secundarios perfectamente dibujados e integrados en la historia, TODOS, tanto los interpretados por actores no muy conocidos (pero desde luego solventísimos) como los interpretados por grandes estrellas, de tal manera que ningún personaje se inserta con calzador creando recodos en la historia, ni los espacios físicos condicionan tampoco la misma.
Curiosamente, pese a ese aparente carácter coral, se oculta la historia más introspectiva y la reflexión más interior que hace Allen, reflexión sobre la creación, la vida/muerte, realidad/ficción desde un punto de vista que ya conocemos pero que ahora alcanza su mayor grado de perfección en la puesta en escena. Una puesta en escena que, como gotas precisas dosifica magníficos chistes absurdos allenianos, algunas concesiones "teatrísticas" (representación del infierno), y mantiene un hilo argumental que pese a su complejidad camina extraordinariamente bien, añadiendo igualmente excelentes pinceladas musicales y algunos gangs maravillosos (el del personaje desenfocado es impagable).
Así pues sólido andamio y excelentes operarios para hacer una película fundamental.
29 de junio de 2005
44 de 47 usuarios han encontrado esta crítica útil
Sorprendente comedia de Allen, en la que narra la vida de un escritor obsesionado con el sexo y con una facilidad sorprendente para romper matrimonios y amistades. Está narrada de forma muy original, mezclando la realidad del escritor Harry Block con la ficción creada por el propio Harry, por lo que varios actores terminan interpretando a un mismo personaje de la película.
Como es habitual en el cine de este director, se tratan temas como el matrimonio, la religión, la muerte y el sexo, con una visión cínica y crítica.
Lo mejor de la película es el extraordinario guión, con situaciones memorables (ojo al "desenfoque" de Robin Williams, genial, nunca había visto nada parecido), y frases antológicas ("Yo soy ateo por la gracia de Dios"; "¿Sabes qué es un agujero negro? -Pues claro, ¿cómo crees que me gano la vida?"; "Las dos palabras más bonitas que te pueden decir no son "Te quiero", sino "Es benigno").
Cuenta también con un espectacular reparto, en el que los actores más conocidos realizan pequeñas pero memorables interpretaciones.
En fin, película inteligente, crítica y con algunas escenas para el recuerdo.
Totalmente recomendable.
Como es habitual en el cine de este director, se tratan temas como el matrimonio, la religión, la muerte y el sexo, con una visión cínica y crítica.
Lo mejor de la película es el extraordinario guión, con situaciones memorables (ojo al "desenfoque" de Robin Williams, genial, nunca había visto nada parecido), y frases antológicas ("Yo soy ateo por la gracia de Dios"; "¿Sabes qué es un agujero negro? -Pues claro, ¿cómo crees que me gano la vida?"; "Las dos palabras más bonitas que te pueden decir no son "Te quiero", sino "Es benigno").
Cuenta también con un espectacular reparto, en el que los actores más conocidos realizan pequeñas pero memorables interpretaciones.
En fin, película inteligente, crítica y con algunas escenas para el recuerdo.
Totalmente recomendable.
1 de mayo de 2006
41 de 46 usuarios han encontrado esta crítica útil
Woody recupera el estilo absurdo de sus inicios, lo mezcla con sus universos posteriores y aprovecha para criticar numerosos aspectos de la religión, de la pareja, del cine... Serán frecuentes, por lo tanto, las visitas de la muerte, el descenso a los infiernos y demás situaciones absurdas como alegorías con las que ir construyendo la vida de Harry a partir de sus trabajos como escritor, en los cuales es incapaz de disimular las realidades en la que se basan, generalmente concernientes a su ajetreada biografía sentimental.
En el montaje también se burla de las moderneces, y emplea las abundantes elipsis breves para ofrecer nuevos chistes. Solté la carcajada cuando Cookie (Hazelle Goodman) le visita y, de un plano a otro, aparece con las ropas rasgadas; y cuando, sentado al teléfono, encadenan tres o cuatro elipsis totalmente innecesarias, pues el personaje apenas ha cambiado de posición ni ha comentado nada.
A quien no la haya visto todavía, le recomendaría que se concentrara completamente durante los primeros minutos, pues en ellos nos llega una avalancha de nombres y personajes reales y ficticios que posiblemente no comprendan si se despistan lo más mínimo. De todas formas, las cosas se irán aclarando poco a poco.
-----------------------------------------------------------------------------------------------------
Harry (Woody) conversa con su propio hijo pequeño, de unos 10 años, en unas convivencias entre padres e hijos en la escuela.
Harry: Hilly, ¿te acuerdas de que una vez hablamos de Freud? Pues Freud una vez dijo que las dos cosas más importantes para una buena vida son el trabajo que tienes y el sexo. Ésas son las dos cosas. Las mujeres son diosas...
Hilly: ¿Dios es mujer?
Harry: No, no digo que Dios sea una mujer. Lo diré de otro modo: las mujeres están. No sabemos si Dios existe, pero las mujeres están. Y no en un cielo imaginario, sino aquí, en la Tierra. Y algunas de ellas, Hilly, algunas de ellas... ¡ejem!... compran lencería Victoria's Secret.
En el montaje también se burla de las moderneces, y emplea las abundantes elipsis breves para ofrecer nuevos chistes. Solté la carcajada cuando Cookie (Hazelle Goodman) le visita y, de un plano a otro, aparece con las ropas rasgadas; y cuando, sentado al teléfono, encadenan tres o cuatro elipsis totalmente innecesarias, pues el personaje apenas ha cambiado de posición ni ha comentado nada.
A quien no la haya visto todavía, le recomendaría que se concentrara completamente durante los primeros minutos, pues en ellos nos llega una avalancha de nombres y personajes reales y ficticios que posiblemente no comprendan si se despistan lo más mínimo. De todas formas, las cosas se irán aclarando poco a poco.
-----------------------------------------------------------------------------------------------------
Harry (Woody) conversa con su propio hijo pequeño, de unos 10 años, en unas convivencias entre padres e hijos en la escuela.
Harry: Hilly, ¿te acuerdas de que una vez hablamos de Freud? Pues Freud una vez dijo que las dos cosas más importantes para una buena vida son el trabajo que tienes y el sexo. Ésas son las dos cosas. Las mujeres son diosas...
Hilly: ¿Dios es mujer?
Harry: No, no digo que Dios sea una mujer. Lo diré de otro modo: las mujeres están. No sabemos si Dios existe, pero las mujeres están. Y no en un cielo imaginario, sino aquí, en la Tierra. Y algunas de ellas, Hilly, algunas de ellas... ¡ejem!... compran lencería Victoria's Secret.
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here
