Pájaros volando

No puedo creer que de las 4 criticas que aparecen una sola este apoyando esta película.
Es un peliculón! Humor inteligente y guiños por todos lados.
Apuesto que a la gente que no le gustó no conoce ni un cuarto de los personajes que aparecen. Una selección increíble. Muchachos, aparece Cafiero! Y esa escena se lleva todos los aplausos, por nombrar una de las tantas.
La verdad, una decepción que la mayoría de la gente no la haya disfrutado.

La película no divierte. Seamos claros. Un puñado de personajes conocidos, queridos y respetados de la política, la música y la actuacion nacional son invitados a participar de una película pseudo-bizarra que se asemeja mas a "Los bañeros mas locos del mundo" o a los peores derroches de celuloide de de las duplas Porcel-Olmedo, Francella- Disi que a una próxima película de culto; y se mezclan con mayor o menor gracia en un guión inconsistente, sin, chispa, sin sorpresa, sin remates que solo hace sonreir cada tanto sin mayor entusiasmo. Capusotto y sus videos han marcado una hito en el humor de la televisión argentina, en donde interpretación, guión y concepto van de la mano para darle forma a un producto maravilloso. Lo mismo supo lograr Alberto Olmedo en la decada de los ochenta, pero en ninguno de los dos casos le atinaron a proyectos cinematograficos que exploten lo mejor de ellos como humoristas.
Ni si quiera se explota el absurdo del guión que podría haber dado para mucho más o quizá haber apelado a la sucesión de gags del estilo "La pistola desnuda"...pero nada. Una película sosa, a mitad de camino de todo y sin sabor a nada.

Excelente sátira del hippismo tardío, el movimiento new age, la vuelta a la vida natural tan común en lugares idílicos como El Bolsón (Río Negro) o algunos pueblitos de Córdoba, el movimiento platillista, el esoterismo, las terapias alternativas, el deseo de huída geográfica que puebla lugares remotos argentinos y de otras partes del mundo, el orientalismo, el progresismo kitch, el mundo rockero, el mundo de los artesanos, los aficionados a la ufología como algunos personajes afincados en Capilla del Monte (Córdoba), a los pies del cerro Uritorco, en fin, son tantos los ítems tocados, analizados y parodiados, que hacen de esta película, además de una efectiva comedia, un profundo cuadro de análisis sociológico. Tan acertados los diferentes personajes en sus estereotipos como efectivos en sus delirantes actuaciones. Además el director no se anduvo con chiquitas en la elección del elenco, todos actores y comediantes sin fisuras. No puede considerarse menos que excelente esta genial película. Además de original por los cuatro costados, tremendamente realista en sus diálogos desopilantes, que si bien provocan la gracia de toda comedia, no están muy lejos de los que pueden haberse producido en los extraños mundos que habitan arquetípicos personajes del mundo actual. ¿O no existen a patadas ufólogos, parapsicólogos, esoteristas, brujos, adivinos, amantes de las terapias alternativas, drogones, psicóticos varios, espiritualistas, espiritistas, pentecostales, y etcétera, etcétera, que tienen diálogos en la realidad mucho más fantásticos y estereotipados que los de la película? Mucho más estrafalarias son las ideas de multitud de gurúes en plan proselitista que, artera o sinceramente, tratan de imponer doctrinas evasoras de la realidad o, lo que es peor, persiguiendo un fin pecuniario. Lo peor es que todas estas ideas no resisten la refutación de las pseudo-ciencias, y para peor, la mayor parte de los adeptos a estas creencias, en realidad les dan visos de realidad. Por supuesto que todos los actores están geniales en sus papeles, y la sátira social funciona pintando un cuadro totalmente argentino pero a la vez universal. LLaman la atención los efectos especiales, precisos y visualmente agradables, perfectamente contextualizados. Una joyita que pocas veces se encuentra en el actual cine argentino. En el camino de Esperando la carroza y de Rancho aparte. ¡Genial! Por favor, no se la pierdan.

A veces me pasa que luego de ver una película desearía poder borrarla de mi mente, no porque no me guste, todo lo contrario; para poder revivir la sensación de la primera vista. Es esa sorpresa permanente, de curiosidad para ver que sigue, etc. Con Pájaros me paso eso. La risa fue casi permanente, situaciones absurdas a más no poder, fresca, original, con buenas y malas actuaciones sale adelante de manera grandiosa. Siete es la máxima nota que me permito para una comedia. Muy recomendable para reír como simio.

Debo ser de los pocos argentinos que no vio videos de Capusotto. Entiendo alguna que otra referencia cuando me hablan de ellos, pero nunca fue un humor que me agrade. Sí lo vi en otras dos películas y me gustó. Por eso supuse que esta iba a ser la tercera y que la iba a disfrutar, reírme mucho y pasarla bien. Pues no. Me reí muy poco, alguna que otra sonrisa y es un film demasiado largo y denso por momentos.

Está claro que es una parodia, una sátira al hipismo, a los ovnis, extraterrestres, y toda esa movida, ahí no hay dudas. El problema es que no es divertida la película. Se pasa de rosca y parece dejar de ser una sátira y queda como un film que busca dejar algún mensaje anti capitalista y anti humanista. La última parte estoy de acuerdo, ya lo dije varias veces, los seres humanos somos lo peor de este mundo.

Por momentos el film no iba a ningún lado. Cuenta demasiadas cosas que no suman. Tiene escenas psicodélicas que están bien, algo esperable. La lucha por que músico era parte del grupo me pareció tediosa. El estereotipo del personaje de Osqui Guzmán me pareció muy desatinado, es cierto que es un film del 2010, pero creo que incluso en esa época podría haber estado mal visto.

Actoralmente tampoco se destaca. Capusotto hace de uno de sus personajes, con ese histrionismo que lo caracteriza. Luis Luque debe ser muy amigo del director o alguien para prestarse a esto. Cuenta con elenco secundario de re nombre, pero tampoco suman, es un film que creo que nadie podría haber rescatado.

El guion es extraño. Parece tener un hilo, una finalidad…pero la verdad que me aburrí muchísimo a lo largo de sus 112 minutos, de los cuáles le sobran al menos 30. Podría haber sido un poco más corta y tal vez más llevadera. Lo más lindo que tiene son los paisajes característicos del Valle de Punilla, mucha belleza por esos lados.

Mi recomendación: Un film sólo para los fanáticos de Capusotto y los delirios místicos.

Mi puntuación: 4/10