Tras una larguísima espera y de ese tráiler que se repetía hasta la saciedad por fin llegó.
Un sensacional arranque, con esa parodia de Green day a Titanic, con el corto de Rasca y Pica, te esperas una grandísima, colosal e histórica película.

Pero una vez llegado al final, te sientes como si hubieras visto un capítulo más largo, falto de personajes secundarios, que tan bien han funcionado durante toda la serie, cameos de famosos, que tambien se había caracterizado como firma personal de Los Simpson.

La historia de amor entre Lisa y el irlandés me parece un poco absurda, falta un poco de acidez al final que asimismo es sello inconfundible de Matt Groening, y sobra el desmesurado uso del ordenador en algunas secuencias.

Pero todo ello es perdonable, porque al fin y al cabo, son Los Simpson, y por ello se merece como mínimo una oportunidad.

Aúnque se advierte que deja que desear en algunos momentos.