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Spain Spain · Barcelona
FA
Collaborator
reporter rating:
6
Documentary In 1997, 19-year-old culinary student Paco Larrañaga was arrested for the kidnap, rape, and murder of two sisters on the provincial island of Cebu in the Philippines. Despite demonstrable evidence of his innocence, including 40 eye-witnesses and photographs placing him hundreds of miles from the scene, Paco's legal ordeal was only just beginning. Dubbed the Philippines' "trial of the century," Paco's ordeal became a galvanizing focal ... [+]
Language of the review:
  • es
June 17, 2012
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La realidad supera a la ficción. Lo hemos oído y dicho tantas veces que dicha afirmación casi ha perdido su sentido. Casi se ha equiparado a decir ''Hace buen día'' o ''Qué le vamos a hacer... ¡es la crisis!'' ¿Qué queremos transmitir cuando vomitamos estas frases que ahora parecen haber sido prefabricadas desde el principio? Nada. Simplemente las escupimos para evitar aquello que tanto se teme y se infravalora hoy en día: el silencio. El caso es que, antes de que todo fuera barrido por esta actual ola banalizadota tan característica de nuestros tiempos, el hecho que lo inventado se vea superado por lo real es una señal irrefutable de lo maravilloso... o terrorífico que puede llegar a ser el mundo en el que vivimos.

Es lo mismo que decir, y ahora no es ninguna tontería, que cualquier sueño puede materializarse ante nuestros ojos. Tanto los más dulces, como las más escalofriantes pesadillas, aquellas que hacen que el que las sufre salga ipso facto y gritando de su estado de letargo, para comprobar, con la frente empapada en sudor gélido, que ha vuelto al mundo real... donde obviamente le aguardan amenazas mucho más peligrosas. Para los que no acaben de creerse aquello de que la realidad supera a la ficción, no tienen más que echarle un rápido vistazo a cualquier lista de mejores villanos cinematográficos del año 2007 (la hay, créanme, de hecho, hay una para cada categoría, la que sea). En ella seguro que aparece (y si no lo hace, es que el ranking en cuestión no vale nada) un tal Billy Mitchell.

¿El malvado supremo de la odisea espacial de turno? ¿El jefe mafioso de una organización de narcotraficantes? ¿Un temible mutante con poderes sobrehumanos? Ni una cosa, ni la otra... y mucho menos la última. Billy Mitchell era el encargado de amargarle la fiesta al bueno de Steve Wiebe, un exprofesor de instituto que conseguía batir el record mundial de las ochenteras máquinas arcade de Donkey Kong. Éste último, cuando se disponía a paladear las dulces mieles de su triunfo freak, recibió una llamada telefónica en la que se le comunicaba, con todo el pesar del mundo, que su astronómico registro no podía ser homologado, y que debería hacer gala de sus aptitudes ante una competición oficial que le enfrentaría directamente al poseedor de la anterior plusmarca, quien por supuesto era Billy Mitchell, un maquiavélico y rastrero diablo, que haría todo lo posible con tal de mantener su hegemonía videojueguil en el documental (es decir, estamos en la ambigua y a menudo engañosa categoría de no-ficción) de Seth Gordon 'The King of Kong: A Fistful of Quarters'.
SPOILER ALERT: The rest of this review may contain important storyline details. View all
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