Segunda entrega de la divertida saga de Torrente. En esta ocasión el grimoso policía se ubica en la ciudad de Marbella, y se hará investigador privado.
En esta parte uno vuelve a ser testigo del mismo estilo asqueroso que se apreció en la primera película. Uno ve situaciones totalmente inverosímiles, capitaneadas por este anti morbo de hombre, cuya única obsesión es el Atleti, el Fary y las mujeres guapas.
En esta ocasión la película cuenta nuevamente con muchísimas colaboraciones de famosos, que realizan papeles de apenas segundos, pero que al final acaba siendo un juego divertido para el espectador, ya que uno intenta descubrir al famoso que se esconde en cada escena.
Santiago Segura vuelve a bordar el personaje más asqueroso que ha dado el cine español, y en esta ocasión le acompaña un impresionante Gabino Diego; que para mí realiza una de sus mejores interpretaciones. Creo que no se le ha tratado en la justa medida a este actor, y en este papel no se le ha valorado el inmenso trabajo que realiza.
Con respecto a José Luis Moreno, he de decir que me sorprendió muy gratamente. Ya que sin ser actor, realiza un trabajo bastante aceptable.
En fin, segunda entrega de esta saga que se encuentra a la misma altura que su predecesora. Si gustó la primera, esta no decepcionará. Una historia llena de chistes burdos y escenas grimosas, que harán que la carcajada esté garantizada y, que la expresión "que asco" siempre esté en nuestra mente.