Se define la obsesión como 'el estado de la persona que tiene en la mente una idea, una palabra o una imagen fija o permanente y se encuentra dominada por ella'. El noruego Roald Amundsen fue un hombre obsesionado con ser el primero en alcanzar las cimas polares. O al menos así es como nos lo presenta Espen Sandberg -Kon-Tiki- en el biopic que lleva el nombre del aventurero noruego.

Con una fotografía impresionante y una puesta en escena sobresaliente, Sandberg nos lleva a conocer la figura de un hombre que hizo historia en los comienzos del convulso siglo XX. El filme presenta un equilibrio bastante acertado entre aventuras y biopic.

Por un lado nos enseña los peligros de las expediciones que el aventurero lideró en los dos polos. En especial la incursión al Polo Sur, que se convirtió en una competición con el británico Robert Falcon Scott para ver quién llegaba primero al objetivo. La dureza de estas aventuras aparece perfectamente plasmada en la película, ofreciéndonos momentos de muchísima tensión.

Por otra parte nos muestra la personalidad de Amundsen, su obcecación por ser el primero y conseguir reconocimiento poniendo en peligro su vida y la de aquellos que le acompañaban. De acuerdo con lo que vemos en el filme, el noruego era un tipo egoísta, arrogante y rencoroso. La difícil relación que mantiene con su hermano Leon -interpretado notablemente por Christian Rubeck- centran gran parte de la obra poniéndole ese punto dramático a la misma.

No obstante, era un hombre metódico, cuyo éxito radicó no solamente en su tenacidad, sino en la precisión de sus métodos. No dejaba nada al azar, por eso logró ser el primero en alcanzar el Polo Sur. El filme critica el escaso reconocimiento que alcanzó por parte de la Real Sociedad Geográfica Británica, quedando los ingleses como malos perdedores

Amundsen es un certero retrato, con sus luces y sus sombras, de una figura con mucha importancia para la humanidad. Asimismo es un relato fiel de una sociedad, la de los primeros compases del siglo XX centrada no solo en el interés científico, sino principalmente en satisfacer el orgullo nacional. Recomendable.

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