Destin Cretton nos presentó una de las grandes joyas indies de los últimos años a partir de unos personajes cercanos y humanamente complejos en el campamento de rehabilitación para jóvenes que nos presenta con gran sencillez.

La película, a partir de su modestia y naturalidad, nos emociona con gran inteligencia y evitando el tono melodramático, siendo un drama más cercano a los cánones de Cassavetes y lleno de complejos seres humanos, débiles, problemáticos y muy conmovedores.

La tremenda verdad que transmite la interpretación de Brie Larson ahonda aún más en los complejos seres humanos que pueblan este maravillosos guión. Un personaje fuerte, lleno de profundas capas y también traumado por el malogrado ambiente familiar pasado.

Una pequeña joya indie llena de honestidad y modestia, una carta de amor a la educación, la solidaridad y la ayuda entre nosotros, con una interpretación de Brie Larson que debería tenerse muy en cuenta.