Supongo, porque la serie esta torpemente narrada y resulta siendo confusa, que la detective protagonista hizo un rito de ocultismo (vete a saber qué, mató una cabra o dijo "vampiro sexi" antes el espejo 3 veces a la media noche) por el que contacto a un vampiro rubio, sexi y con complejo de Tom Cruise en "Entrevista con el vampiro". El vampiro, que por cierto es un príncipe de chorrocientos años, oí mencionar, se siente inexplicablemente atraído por la detective cara de piedra (digo inexplicablemente porque la relación se desarrolla con nula emoción, el la acosa porque sí, y le vale madres que ella parezca su madre y siempre parezca confusa). Aparte de eso, por ahí anda el ex-novio de detective carapiedra, actuando con el culo; para tratar de hacer un triangulo amoroso tan apasionante como depilarse la entrepierna. Para variar y hacer que las "góthgirls" se sientan identificadas, la detective carapiedra tiene una "secretaria gótica" que viste los modelos más sensuales y obscuros del "salvation army" y siempre está sonriendo como si en cualquier momento fuera a decirle a la jefa: "cariño, te ves muy tensa. ¿Quieres que nos quitemos la ropa y juguemos juntas con el dildo". Y finalmente los efectos especiales....que puedo decir...los power rangers los tenían mejores. Si la serie es una buena adaptación de las novelas, pues debo decir que al fin encontré algo bastante más ridículo que las nefastas obras de Stephany Meyer. El género de vampiros nació y murió con Bram Stocker, ya que lo dejen descansar en paz.