¿Cómo titularías una película que es tan mala como un ardor de estómago, que a ratos es ridículamente romántica, que roza el absurdo en varios momentos, en la que aparece David Hasselhoff sin venir a cuento con la misma gracia que si apareciese mi panadero y que en definitiva, es tan estúpida que te dan ganas de llorar y de arrancarte los ojos de sus cuencas? Ahhhhhhh si, Fuga de Cerebros 2!!!!!!!. Porque con esta basura de película se confirma la grandeza de nuestro querido cine español y de que las segundas partes nunca fueron nada buenas. Si tienes la oportunidad de verla, corre lejos... Tu estómago y tu bolsillo te lo agradecerán eternamente.