Janice Sterling es una mujer hecha a si misma, en un mundo de hombres envidiosos de su fortuna y habilidad. No hay marido ni padre que la tutele. Ha edificado un imperio de los cosméticos. Pero en el Comité de dirección, formado por hombres mediocres le faltan al respeto. Incluso las secretarias la envidian y conspiran con sus novios ejecutivos contra ella, con la excusa típica: "hay que protegerla del engaño". Corman ataca de manera velada al machismo imperante en aquella época, donde la mujer solo podía aspirar a cargos administrativos o a "esposa-de-".

Sin embargo, Janice Sterling tiene un hándicap: su riqueza se basa en algo tan fútil como la belleza. Eso la lleva a ofrecerse de conejillo de indias en un experimento que patrocina, con resultados asombrosos, ante la incredulidad de sus mezquinos empleados.

"The wasp woman" es una curiosa reflexión sobre el triunfo de las mujeres en un mundo de hombres, aunque luego deviene en la típica monster movie de maquillaje cutrón, donde los experimentos fallidos, las prisas y la mala suerte llevarán a la protagonista, al igual que el de "La Mosca" a un final aberrante y predecible. Y es que estábamos en los 50.