Enésimo found footage, falso documental con cámara en mano de las que marean de verdad; añádele el esquema frecuente de este tipo de películas (trama que va desde la risible serenidad hasta la angustia atropellada) tan de moda últimamente, y sabrás todo lo que te ofrece este consumible producto.
Así aprovechando la inagotable batería de su súper cámara digital (ya que somos universitarios americanos de familias millonarias) nos vamos de excursión alternativa a miles de km., para desentrañar entre la gélida nieve rusa, uno de los misterios más inquietantes de la historia parasicológica (para que se muera de envidia Iker Giménez).
El insólito incidente del paso de Dyatlov, el caso real en torno al que gira este falso documental, es sin dudarlo, lo realmente rescatable de este trabajo. El misterio y los enigmas de aquello que ocurrió en los Urales en 1959.
En conclusión, un falso documental con muy poco que rascar. No se pueden salvar ni su tópico y típico guión, ni los modestos y moderados efectos visuales, ni las ridículas y planas interpretaciones, ni el rocambolesco y rebuscado final…
Nada es rescatable. Paso de este paso. A la nieve con ellos.