Esta misma semana he visto otra película sobre el mismo tema, Espías desde el cielo. En esta ocasión aborda el tema desde un punto de vida diferente. En Espías desde el cielo hablan de la burocracia para cometer un atentado mas o menos justificado contra un enemigo de Estados Unidos, creo que exageran un poco el tema de los protocolos y aunque toca el mismo tema, el de la moralidad de los daños colaterales.

En Good Kill también exageran pero por exceso e permisividad para poder matar utilizando el ejercito para fines poco claros manejados por la CIA y el Gobierno. Algo poco creíble y también la moralidad de los ejecutores que son soldados entrenados para cumplir ordenes y no cuestionarlas.

Esta película también parece un vídeo juego pero con una historia de un matrimonio roto por medio con todos los tópicos posibles, el protagonista se da la bebida y ya no se entiende con su guapa esposa.

No me gusta Ethan Hawke en el papel que hace, tiene demasiada pinta de buenazo para hacer un papel tan atormentado como el que hace y January Jones muy correcta esposa de piloto, el sueño de cualquier chica.

La cruda realidad es que son asesinos, ejecutores desde casa y tiene que ser duro tener ese trabajo. El día que sus enemigos aprendan a utilizar drones espías no tripulados, van a hacer mucho daño. La guerra del futuro.