Jim Jarmusch resurge de sus cenizas tras la incomprendida "Los límites del control" (The Limits of Control, 2009) para darle una vuelta al subgénero vampírico con su notable "Only Lovers Left Alive", un trabajo que fue aniquilado en su proyección durante el Festival de Cannes y que demuestra tanta valentía y aplomo como cabría esperar de su realizador. La tesis consiste en desmitificar a la criatura para darle un enfoque no tanto mitológico como integrado en el mundo, aún pese a que éste la desconozca, en un movimiento que está alejadísimo del fantástico y el terror para ser abordado desde un punto de vista dramático. Así, que sean vampiros no es tan importante como las necesidades que ésta condición les crea: podrían ser drogadictos, enfermos, etcétera. Pero son vampiros. El tiempo que llevan sobre la Tierra les condena, están hartos, pero deciden seguir adelante. La premisa es muy sencilla pero en enfoque es lo que la hace elevarse por encima de la media. Es de pura abstracción.

Si en 2012 Neil Jordan nos devolvió el romanticismo en el género (bien entendido, no penséis en "Crepúsculo") con "Byzantium", lo que hace Jarmush es prolongar esta buena racha para el subgénero no tanto con ideas nuevas como con las clásicas llevadas hacia otros derroteros. Por resumir, podríamos decir que con "Only Lovers Left Alive' Jim Jarmush consigue para el vampirismo prácticamente lo mismo que hizo Richard Linklater con su trilogía "Antes del..." por el cine romántico. Esto es, un tratamiento de los personajes basado en sus interacciones y un guión muy cuidado, con conversaciones creíbles, inteligentes, lejos de los chascarrillos o las catchphrases que tanto abundan en estas situaciones. También hay ecos a obras como "Entrevista con el vampiro", especialmente en el (brillante) personaje de Mia Wasikowska, y cómo no, la mano d Jarmush es claramente visible en el modo en que retrata los espacios, la soledad de quienes los pueblan, y cómo sus personalidades se moldean. El romanticismo empapa toda una historia que por otra parte juega a desmitificar, actuando como un doble agente en plenitud de sus facultades. Poco puede decirse de los actores más allá de que están soberbios, tanto Tilda Swinton como Tom Hiddleston, que más que interpretar viven a sus Eva y Adán.

En resumen, "Only Lovers Left Alive" es un logro extraordinario a la hora de conferir al vampirismo un lugar más allá de las convenciones tradicionales, en cuanto a tratamiento de sus personajes y dominio de la narración con, y sin diálogo. Quienes busquen vísceras y sangre acabarán totalmente decepcionados, pero como ocurría con (la incomprendida) "Byzantium", aquí el juego es otro. Obligada.