Si bien es cierto Neftlix se ha consolidado y diferenciado por mostrar al público una infinidad de series, en su gran mayoría muy destacables, también cuenta con una corta pero interesante cantidad de películas, en algunos casos, realizadas exclusivamente para ser vistas a través de ese medio. Títulos como Annihilation y Little Evil, solo por citar algunas producciones, han sido perfectos escaparates para salir de la rutina. Lastimosamente han quedado opacados por esta nefasta pseudo película que juega a ser thriller, repitiendo los mismos tópicos de paciente-doctor y/o victima-victimario sin lograr un resultado satisfactorio. El final es jodidamente malo y forzado. Alistair Legrand con esta película ha demostrado que es cualquier cosa pero menos un buen director. No hay realmente ningún aspecto cinematográfico que sea medianamente bueno, absolutamente nada. Qué desperdicio su visionado, ¡por la puta madre!, con bodrios así reconsidero si vale la pena pagar por un plan mensual. Netflix, me dueles..